El irreverente, provocador y genial músico Albert Pla, se acercó el pasado viernes 31 de octubre a la Sala Jimmy Jazz gasteiztarra para ofrecer, junto al guitarrista Diego Cortés, un recorrido por las más exitosas canciones de este artista de Sabadell que en 1989 publicó su primera obra.

Pasadas las diez de la noche, ataviado con un camisón, unas botas de agua, acompañado por su guitarra y ante la expectación de la audiencia, salió a escena el bueno de Albert Pla para arrancar su acto con "Todo es mentira", corte incluido es su disco "Somiatruites" (2011).

Con su particular humor, su teatralizada voz y algo de timidez Albert se fue ganando al público canción a canción, ofreciendo un show lleno de música y teatro a partes iguales y despachándose a gusto con la política, las hipotecas, la televisión, la policía, los bancos e incluso los manifestantes.

Tras esa primera toma de contacto con los presentes en la Sala Jimmy Jazz, toco interpretar "Corazón", una canción perteneciente a la obra "La diferencia" (2008), que encandiló a sus seguidores y que arrancó muchos aplausos. Aplausos que fueron muy numerosos a lo largo de toda la actuación.

A continuación el guitarrista barcelonés Diego Cortés hizo aparición sobre el escenario. El artista flamenco, cuyo curriculum abarca actuaciones con Celia Cruz, Paco de Lucia, Mike Oldfield o Los Ramones y que en 2001 inició su colaboración con Albert Pla participando en festivales como el Viña Rock o el Espárrago Rock, acompañó con su arte a las seis cuerdas las historias que Albert nos iba narrando.

Albert Pla fue contando un relato lleno de risa, recovecos y grandes dosis de ironía mordaz. Y haciendo gala de su gran sutileza y sátira, y una gran capacidad interpretativa, el polifacético músico de Sabadell divirtió, distrajo y deslumbró a los presentes, a la vez que les hizo reflexionar. El vocalista también nos atrapó con su voz, sus susurros y sus gemidos.

Con el guitarrista en escena, la actuación continuó por los mismos derroteros. Muchas carcajadas y la descarga de grandes temas como "La diferencia", la simpática "La bomba" o "La colilla", canción esta última con la que viajamos a unos Estados Unidos que ardían poco a poco.

Durante el directo de Albert Pla y Diego Cortés, hubo tiempo para disfrutar con un solo de este maestro del flamenco que nació en el año 1956 en el seno de una familia de tradición flamenca. Diego arrancó con el "Concierto de Aranjuez" de Joaquín Rodrigo, hizo un guiño a "Entre dos aguas" de Paco de Lucia y fue ovacionado tras su intensa exhibición.

Ya con Albert Pla y su espíritu de niño en escenario, el público vitoriano volvió a disfrutar y sonreír con "En el bar de la esquina", "Ciego", en la que se mezcló entre el público e "Insolazión", canción con la que se llegó al momento en el que los artistas abandonaron el escenario para tomarse un descanso y ser recibidos nuevamente con una sonora ovación.

"El lado más bestia de la vida" y "El sol de verano" se encargaron de poner el punto y final a un show divertido y diferente, un concierto a medias entre la actuación y la canción con el que llenaron de alegría y simpatía el local vitoriano.

El dúo se complemento perfectamente a lo largo de toda la velada y juntos se ganaron e hicieron pasar un rato agradable a un público que prácticamente llenó la Sala Jimmy Jazz y que, sin duda, no se arrepentirá de haber empezado la noche de Hallowen acompañados por estos dos genios.