De nuevo Los Rebeldes sobre los escenarios de Euskadi, se dejaron ver el pasado sábado 9 de abril en la Kultur Etxea Torrezabal de Galdakao, Bizkaia, una nueva sala que ganamos para los alrededores de Bilbao por la que ya ha pasado el mismísimo Rosendo Mercado, también da oportunidad a las bandas locales, todo un lujo ver a las formaciones nóveles tocar sobre el gran escenario de aquel reformado auditorio, que para los conciertos recogen sus butacas de una forma rápida y cómoda.

Los Rebeldes volvían a tierras bizkainas, recordamos que la última vez fue en la desaparecida Rock Star Live de Barakaldo, también en una de las ediciones del Concurso Rockaldia, pero lo dicho, hacía muchos años que no les veíamos por aquí.

Larga historia de 35 años encima de los escenarios, con unos últimos meses girando en formato acústico dentro de un tour denominado “En Cuerpo y Alma”, curiosamente el día anterior a este evento finalizó dicha gira así que en Galdakao les vimos distorsionados, formato que utilizarán de aquí a sucesivos meses durante la larga lista de festivales que tienen por delante. Además pronto darán salida a un nuevo disco que ya tienen grabado, faltan pequeños detalles pero después del verano habrá novedades, saber, que su último álbum data del 2013, “123 Acción”, y ya es hora de que tenga su relevo.

Como banda invitada contaron con la formación bilbaína de Santiago Delgado y Los Runaways Lovers, un grupo que conocimos las pasadas navidades cuando editaron un curioso disco con temas propios a modo villancicos, “Quiero Ser Santa”, con sonidos surfero – rockabilly. Actualmente han sufrido cambios en su formación, ha entrado un nuevo percusionista, Ricardo Aitor Ibañez Vallbona, batería de Toni Metrallay Los Antibalas, Speed Rockin Trio y anteriormente en La Secta, Safety Pins y los míticos Friday Golfos.

Sonidos du-dua marcados por los registros melódicos de Santiago Delgado y su guitarra acústica, con apoyo a las voces de Junajo Ibarra, y respaldado por el gran guitarrista Carlos Beltran (ex Boogie Punkers, Gacela Thompson), y al bajo, Julio Ortiz.

Tienen tres discos, “Por el Amor al Rock and Roll” en el 2010, “Monovolumen” en el 2014 y “Quiero ser Santa” en el 2015, más un Ep “Gabba Gabba Twist”, este del 2013, con una larga lista de himnos que nos hicieron ver, con reminiscencias a los Ramones y rock and roll americano de los años 50 – 60, más alguna adaptación, como la de Nat King Cole “Lullubelle”.

Comenzamos a modo twist, “Gabba Twist”, para pasar rápidamente al recuerdo ramoniano “Ramones” y “Jhonny Ramone”, continuando con “Nick Curran” cuajando su lado amoroso, “Es Por Ti”, o seguir su curso de melodías y guasa con “No me Pises los Boggies”, “Tabardillo Twist” y su coreado himno, “Jonathan”, sin olvidarse de la divertida “6uerseys 6”.

Dejando para el final un pequeño homenaje a Los Sirex, “Que se Mueran los Feos” y su honorífico tema “Runaway Lovers”, dando por concluido un recital con los más gélidos sonidos boogies.

300 almas estaban esperando a Los Rebeldes, fueron recibidos con los brazos abiertos y nos recompensaron con creces con la hora y media de actuación, consiguiendo crear aire festivo con un buen desfile de clásicos, y lo hicieron desde el inicio, con esa propuesta con contrabajo, acordeón y hammond que tienen, sin olvidarnos del saxofón y los habituales batería, guitarra, bajo... Repasaron los primeros discos, esos que lanzaron a la fama a la banda barcelonesa, en aquella época estaban en la cresta de la ola siendo unos de los referentes de aquella movida madrileña.

“Quiero Ser Una Estrella” daba el pistoletazo de salida, por delante teníamos 20 canciones que poco a poco se iban cargando con sonidos de viento a cargo de Dani Pérez, que tuvo un gran protagonismo con su saxofón. Siguieron con “Español en New York”, “Loco de la Autopista” o “Pettit Michelle”, ideales para ser coreados por el respetable, apareciendo las palabras de agradecimiento de Carlos Segarra, que se atrevió con el euskera, un bonito detalle.

Su disco “En Cuerpo y Alma” del año 92 tuvo su protagonismo con canciones como “Mía” o en la recta final con los bises “Rebeca”, temas que en su día eran imprescindibles en las radiofórmulas del tipo 40 Principales, pero hoy, esas grandes cadenas, tienen olvidadas a este tipo de formaciones.

Mucho teclado hammond, también acordeón, dando un toque  hard-rockero a las canciones, apareciendo potentes “Esa Manera de Andar”, “Caldonia” o “Libertad”, que nos conducían al ecuador del concierto dándonos un pequeño respiro tras la canción “Corazón de Rock n Roll”, para luego el batería Wichy situarse sobre un cajón, Calos Segarra con su acústica, cambio de camiseta pasando de la roja a la vaquera y Antonio Garrido al contrabajo, un poco de intimidad, acústica y dos temas, “En Cuerpo y Alma” y “La rosa y la Cruz”, creando un ambiente cálido y cercano, las luces tenues y todo “desenchufado”, un momento para el recuerdo.

La recta final del concierto vino más festival con la incursión de las canciones más emblemáticas de Los Rebeldes, “MI Generación”, “Mediterráneo”, pero antes apareció la melosa “Eres Especial”, dedicada a todas las neskas del lugar (neska = chica), para luego abandonar el escenario con su alocada y dorada “Rebeca”.

Fueron aclamados sin concesión, Los Rebeldes no tuvieron otra que volver a tocar, esta vez con nuevo cambio de camiseta de Carlos Segarra, ahora le tocaba una negra. Nos conquistaron con dos temas míticos, el medio tiempo “Bajo la Luz de la Luna” y la rockera “Mescalina”, donde su hija de 12 años gritaba más que el resto, y remataron con “Tu serás mi Baby” de Les Surfs.

Los Rebeldes, 35 años de historia, una buena colección de himnos, e imprescindibles dentro de nuestro rock, nosotros al menos no les hemos olvidado.