Screamers & Sinners, Señor No y Sumisión City Blues se dieron cita la noche del sábado 7 de enero en la Sala Hell Dorado de Vitoria-Gasteiz y allí estuvimos para vibrar con el empuje y la calidad de las tres bandas.

Tras publicar varios singles y EPs a la formación gasteiztarra Sumisión City Blues le llegó el turno de dar forma a su primer larga duración. Un trabajo que se compone de once pistas, al que han bautizado con el nombre de "Hay un plan trazado desde arriba que se llama..." y que presentaron el primer sábado del 2017 en la Asociación Cultural Hell Dorado, sala que en 2016 celebró su 15º Aniversario. Como compañeros de cartel contaron con la formación donostiarra Señor No y Screamers & Sinners, encargados estos últimos de arrancar con las actuaciones.

A las 23:00h. daba comienzo la velada en la Hell Dorado de la mano del cuarteto de Arrasate (Gipuzkoa) Screamers & Sinners, combo formado Karlos (contrabajo y voz), Iago (guitarra y voz), Rober (batería) y Tupeloko (saxo y harmónica) que pronto activó a la audiencia gasteiztarra.

En unas semanas verá la luz el segundo larga duración de este grupo dio sus primeros pasos en 2012 y que practica un psychobilly alegre y enérgico con influencias punk, soul, shuffle o rock and roll clásico. Y dado el inminente lanzamiento de "The revenge of El Sacamantecas", su nuevo trabajo, los allí presentes tuvimos la oportunidad de escuchar un buen número de temas nuevos. Ese fue el caso de "100 maniacs", "Horror ladies" o "Cannonball Joe", cortes con el que dieron comienzo a la función y que provocaron los primeros bailes en el local.

Un contrabajo frenético, el carácter punk y la actitud mostrada sobre las tablas por el cuarteto hizo que el directo se nos pasase volando. Casi sin darnos cuenta estábamos saltando con "Tutankhamun", otra de las nuevas canciones que cayeron a lo largo del concierto de Screamers & Sinners y con la que cerraron la actuación. Antes las veteranas "Little Jim" y "My way" se habían colado en un repertorio cargado de los temas más actuales de los de Arrasate.

Pasadas las doce de la noche llegaba el turno del rock; le llegaba el turno a Señor No. Con más de 20 años de experiencia en la carretera y presentando su último disco “No cambies siempre”, el cual les ha llevado a pisar escenarios de todo el estado, la mítica banda guipuzcoana salió a la tarima de Hell Dorado a darlo todo y a dejarse la piel sobre las tablas, y eso se notó; Xabi (guitarra y voz) no paraba de animar a un público que de por sí estuvo entregado desde el primer momento de la actuación y que disfrutó hasta el último acorde del concierto.

Rock con letras mayúsculas, solos vertiginosos, y una banda muy compenetrada es lo que pudimos encontrar a lo largo de cortes como “Llámame”, “Laberintos” o “No me hables”.  En otras palabras, lo que Señor No ofrecen es  una gran descarga de rock and roll del de toda la vida, sin pelos en la lengua y con un absoluto protagonismo en las guitarras, especialmente la Gibson de Xabi, que rugió a la perfección en cada solo.  Éste, en la última canción del show bajó del escenario para fundirse con el público, poniendo así el broche final a una gran actuación.

El broche a una intensa noche lo pusieron los locales Sumisión City Blues. Experimentado quinteto que hasta la fecha había preferido el formato EP para dar salida a sus temas y que se presentaba ante su público con su "Hay un plan trazado desde arriba que se llama..." recién sacado del horno.

La audiencia pronto pudo disfrutar de la efectividad y experiencia del quinteto sobre la tarima y se movió sin descanso con "Besar a cualquiera", "Mi crucifixión" o "Amoniaco impuro", canciones que abarcan diferentes géneros musicales como son el rock and roll, el punk, soul o el blues. Estilos que fluían y se entremezclaban con maestría, arrastrando a los suyos a aplaudir y cantar ante cada descarga ofrecida desde el escenario.

El vocalista Pela, ex Obligaciones, que se mostró provocador y activo ante el respetable, se hizo dueño y señor de un escenario en el que acompañaron Anti, Joseba, David y Kike. Y juntos llenaron de fuerza y actitud el local del extrarradio gasteiztarra.  

Sumisión City Blues dieron la oportunidad al gentío de degustar las nuevas "Obedece", "Nadie te ayudará", "La guerra", "Fuego" y como no, "Quiero un rehén", tema este último que cuenta con vídeo clip propio y que en la Hell Dorado se cantó de principio a fin. 

Sumisión City Blues, que cerró la actuación con "El odio que guardas para mí", ha dado un gran paso con la publicación de este nuevo trabajo y en directo son puro carácter. Por delante tienen una serie de fechas de presentación de su más reciente trabajo, las más inmediatas son las del 26 de enero en el Gaztetxe de Arrasate (Gipuzkoa) y la del 29 de enero en el Satelite T de Bilbao, ¡No te los pierdas!