Siempre hay grupos que te quedan marcados. Que, directa o indirectamente, han formado parte de la banda sonora de tu vida. Pueden pasar meses o incluso años sin escucharlos, pero siempre vuelves a ellos. Aunque sea por pura casualidad. Thirty Seconds To Mars es el claro ejemplo de ello. La idea de poder verlos en directo, emociona. Y tratas de que no te decepcione. Así que, el verlos el 12 de abril en el WiZink Center (Madrid), fue una de las oportunidades de las que no me arrepentiré jamás, independientemente de lo que sucediera.

Altas expectativas en este “European Tour”, que está llevando a la banda estadounidense por varios puntos de Europa, entre ellos, Madrid, Bilbao y Barcelona. El grupo liderado por Jared Leto está inmerso en la presentación de su último álbum, “America”. Aunque también había emoción por escuchar y cantar a pleno pulmón sus grandes himnos.

Altas expectativas que, por momentos, no llegaron a cumplirse. Juegos de luces espectaculares, con gran interactuación con el público (y es que, de hecho, parte de qlos fans acabaron en el escenario). Además, ese derroche de energía de Jared, nos sirvió para venirnos arriba desde el principio. Sin embargo, se echó en falta a Tomo Milicevic, guitarrista de la banda, cuyo sonido fue previamente grabado.

Desde las 21.30 horas estábamos esperando a que apareciera Thirthy Seconds To Mars. Se hicieron esperar menos de lo habitual y a las 21.44 horas, como un clavo, aparecieron con “Up In The Air”, para seguidamente venirnos arriba con “Kings and Queens”. Enfundado en un poncho, Jared Leto fue, sin duda alguna, el gran espectáculo de la noche.

Nada que objetar con la maravillosa y dinámica puesta en escena. Supieron jugar muy bien con los audiovisuales y sacaron mucho partido de las redes sociales de la banda, grabando en streaming algunas canciones y proyectándolas en las pantallas. Con “This Is War” lanzaron decenas de globos desde el escenario, que acabaron botando entre el público. Y para que el show no decayera y, tras verbalizar una mil veces el amor que sentía por este país, Jared saltó y cantó “Do or Die”, mientras hondeaba la bandera de España. Tampoco faltaron otros temas como "The Kill", "Hurricane" o "Search And Destroy".

E incluso en medio de esta fiesta, Jared Leto se atrevió a versionar a Rihanna, con su particular “Stay”. Cosas más extrañas se han visto, sobre todo, mientras sonaba en todo el Palacio de los Deportes, “Walk On Water”. Si creíamos que nada más podía ocurrir, el frontman de Thirthy Seconds To Mars llamó al escenario, por sorpresa, al mismísimo Pablo López.

Tras quedarnos algo “patidifusos”, una nube de confeti y “Closer To The Edge” señalaban el final del espectáculo. Un espectáculo del que, sin duda, esperábamos mucho más. Al fin y al cabo, son Thirty Seconds To Mars.

Nota: las fotos son del concierto que ofrecieron días despues de Barakaldo.