COLABORACIONES
 Crónica
 
Rebujas rock 2.010
  17/09/2010     
  María G. Guerrero     
  Karlos García
  Rebujas
  Recinto, San Mateo de Buelna, Cantabria
www.insonoro.com

Que nos vamos haciendo viejos y que el tiempo pasa a veces se nota en las arrugas o en los kilos de más. A mí, como todavía me queda mucho para tener arrugas, y sólo me veo las típicas de sonreír (que por cierto me encantan), y como me quiero tanto que ni siquiera me permito asustarme subiéndome en una báscula, no me queda otra que ver el paso de los años reflejado en el número de ediciones que vamos asistiendo a los festivales.

Ahora le toca el turno al Rebujas y a su 14ª edición. Y sí, como todos los años para allá fuimos. Si mal no recuerdo y no me engaña el combo del alcohol y de la neuronas caducadas llovió tímidamente al principio de los conciertos, pero aquello tampoco importaba mucho pues ya estábamos todos bastante mojados por dentro como para que el agua no nos empapase la ropa.

Iba a comentar que este año el cartel era de lujo y que cómo nos lo íbamos a perder. Pero es que ya no hay excusas que valgan, al Rebujas vamos por inercia y tanto por los grupos como por la fiesta. Por otro lado sí que tal vez puede ser cierto que este año los grupos eran más que atrayentes para una gran cantidad de público bien diverso.

Por eso estaba segurísima de que aquello se iba a petar, y es que no hace falta ser muy listo para intuir que el que no iba a ver a A-Tono, iría a ver a S.A., a los Lendakaris, a Desastre o a Hora Zulú. Ahora la fiesta que se montó en San Mateo superó con creces cualquier expectativa. Creo que es la vez que más gente he visto en mi vida en este festival y en cualquier otro de estas características.

Estuvimos muy a gusto, como siempre, pero nunca había deseado tanto como esa noche que la peña se pirase a su casa, que me alegro por la organización mucho, ¡pero madre mía qué agobio de gente, jejeje! Aunque sinceramente no hacen falta miles de personas para que un evento sea grande, la grandeza del evento para mí en este caso y en otros muchos reside en las personas que lo organizan año tras año.

Como apunte final es obligado comentar el buen gusto de la gente que organiza el Rebujas Rock. Tal vez este año es de los que más tirón puede haber tenido el festival, pero sin duda alguna se han ganado un altar a pulso. Y es que estaba yo pensando cuando conocí el cartel, ¡qué grupazos!, y al momento pensé ¡y cuándo no es fiesta!.

Pocos festivales gratuitos y del estilo del Rebujas pueden escribir una historia de tantos años que haya  contado con desfiles de grupos de gran envergadura. ¡Y qué siga esta bendita tradición por muchos años!.

  
Ambiente
 

Hay cosas en el Rebujas que no cambian, una de ellas es que dentro del cartel haya un grupo de Cantabria. Este año le tocó la perra gorda a A-Tono, banda que meses atrás, en Abril, editaron su primer disco “Manos contra la pared”, el cual venían a presentar.

La verdad es que no pudimos disfrutar al 100% de la formación, el concierto nos pilló bastante avanzado, es lo que tiene salir de trabajar a la misma hora que empieza el festival. El primer tema que les vimos fue una versión de Kaos Etíliko, “Sale el Sol”, para mí un destrozo pero no sé si sería porque acabábamos de llegar y no teníamos los oídos a tono o si fue porque realmente sonó mal.

Posteriormente y mientras seguían presentando las canciones del “Manos contrala pared”, el cantante se enfundó la acústica y demostró todo su poderío a las seis cuerdas, mientras el resto de la banda se tomaba un respiro. Luego vimos otra versión más, esta vez sí, mejor que la anterior, la de “Vicio” de Reincidentes.

Es curioso pero en anteriores ediciones la banda de Cantabria no había desatado tanta locura, había muchísima gente viéndoles, era el anticipo de lo que veríamos después porque con S.A. no se veía donde terminaba el público y donde empezaba la barra.

Un concierto donde vimos a la banda disfrutar y sentirse a gusto, en la recta final de la actuación dedicaron un tema a la organización del Rebujas, en especial a César y a Rubén… es de bien nacidos ser agradecidos, sí señor!!!.

  
A-Tono
 

Otra cosa que no cambia en el Rebujas y que esperamos que nunca cambie, es la participación y compromiso de Desastre con el festival, el grupo está enamorado de San Mateo, y San Mateo del grupo, es más, un callejón del pueblo se llama “Callejón Desastre”, pero me temo que eso ya lo sabíais.

Y me pregunto. ¿Cuándo tocarán más tarde o cerrarán el festival?. Yo creo que se lo merecen, son muchos años asistiendo a la cita de Septiembre, pero que yo recuerde nunca han tocado en una posición considerada “la hora buena”, donde más gente les puede ver… será cuestión de tiempo, digo yo.

Su “Callejón Desastre” sigue sonando por toda Cantabria, ya va para dos años desde la salida del disco y todos nos lo sabemos de memoria, muchos temas de él destriparon aquella noche, sobre todo “Que no Amanezca” que para el Rebujas es mucho más que una canción, es un himno que la banda quiso dedicar al festival por todos los años de confianza y amistad. Conclusión, tocaron en casa ante su público.

  
Desastre
 

Hora Zulú se debe conocer de memoria el camino Granada – Cantabria, no hay año que la banda no nos visite una o dos veces y es que por esta zona gusta mucho, su estilo musical se puede decir que es único y casi propietario y posiblemente sin fecha de caducidad, de lo mejorcito que tenemos en nuestro país.

Su anterior visita fue hace poco más de un año, en la edición del 2.009 del Azeros Rock, allí Ernesto (guitarra) volvió a tocar con Hora Zulú después de varios años de ausencia, además su batería no era el oficial ya que por esas fechas estaba de baja.

La formación al completo se asomó por San Mateo para machacar nuestros oídos, no sé si subieron el volumen o yo que sé, pero las pantallas empezaron a rugir como nunca y quieras que no, ese ritmo se te mete por las venas.

En general hicieron un buen concierto, empezaron muy potentes y cañeros, luego a medida de la actuación ya se les veía un poco cansados pero luego en la recta final resurgieron y nos martillearon los oídos.

Puedo entender que en cierto modo si no conoces los temas del grupo puedas llegar a desanimarte en un concierto suyo. Bueno, la verdad es que no lo comprendo pero lo respeto. Y digo que no lo entiendo porque me parece más que difícil resistirse al potencial de la puesta en escena del grupo. Tal vez sí que los ritmos son muy parecidos entre todos sus temas, pero probablemente lo son de la misma forma en la que todo el punk, el rock y el heavy suenan cada uno de igual manera para el que no lo haya escuchado demasiado. Por otro lado, Hora Zulú tiene un sonido tan característico que es difícil compararles con otros grupos.

Los músicos muy comprometidos cumplieron con creces, ninguno paraba quieto, los gestos y caretos de Ernesto, los bailes hipnotizantes de Paco Luque y las posturas del bajista Alex, sin olvidarnos de Aitor y su gorra, ¿Cuándo habéis visto a Aitor salir a tocar sin la gorra?, yo nunca, es más si le veo por la calle sin ella no le reconozco J.

Lo dicho, esta gente son grandes y se merecen más, tocar en grandes festivales y salir por Europa a mostrar todo su poderío andaluz!!

  
Hora Zulú
 

No sé que tendrá Soziedad Alkohólika que a todo el mundo le gusta, yo personalmente, les he visto tantas veces que ya no me motivan como antes, pero en el Rebujas la cantidad de gente que les vio fue acojonante. Según gente de la organización, fue el Rebujas con más afluencia de peña de toda la historia, felicidades por ello!!!

S.A. continúan con su gira presentación de la regrabación del disco negro denominado “Sesión# 2” y prácticamente en este último año no han cambiado de repertorio, tocando como primeras canciones las pistas de dicho disco: “Perra vida”, “Ni por favor ni Ostias”, “Pelota”. Para luego continuar con otra serie de clásicos, quizás los más “blandos” como “Ratas”, “Piedra contra Tijera” o “No Kiero Participar”.

Y lo que es un clásico en toda regla son las dos canciones finales, el “Motxalo” y por supuesto “Nos vimos en Berlín”. Mira que son años siguiendo a esta gente y no alcanzo a recordar si otros conciertos los han terminado con otros dos temas.

Respecto a la actitud de la banda, pues como siempre, muy poco comunicativos y según veo, siguen practicando la filosofía de “yo vengo a cantar mis canciones, el resto de cosas me da igual”, salieron con sus decenas de pantallas, enchufaron un par de ellas, y ale!, a darle calor, ¡ Viva el show y la parafernalia!.

S.A. son muy grandes, pero lo serían más si se abrieran algo al público presente que al fin y al cabo son los “culpables” de que estén donde están.

  
Soziedad Alkohólika
 

Aquello se acababa y los encargados de poner el broche final a la estupenda fiesta de San Mateo fueron los Lendakaris Muertos. Así que ellos fueron los culpables de que este año nos quedásemos todo el festival. Pues sí, dame pan y llámame tonto, pero creo que es de los pocos grupos que consiguen que sean más de las tres de la madrugada y no se me caigan los ojos al suelo de cansancio. Podría intentar encontrar una explicación pero creo que todos ya sabemos el por qué.

Creo que nunca lo había pasado tan bien y tan mal a la vez en un concierto del grupo navarro. En un alarde de valentía fruto de la emoción de volver a verles y de las copas de más, cualquier distancia era demasiada, así que me vi casi en primera fila y por el medio, tal cual lo haría la grupi número uno, y también me quisieron copiar los miles de personas que allí se quedaron. Fue muy divertido porque no hacía falta ni moverse para acabar en la otra punta del escenario, pero por otro lado hacía mucho tiempo que no empujaba tanta gente y que no temía tanto por mi integridad física.

¿Los temas qué tocaron?, pues un montón. Dieron el concierto largo con casi 40 canciones. Empezaron por “Dame punk y dime tonto” y acabaron con “Veterano de la kale borroka”. Entremedias el agradecimiento a un chaval que les regaló una taza con un oso panda, el morreo con un tío, la camiseta de España, la bronca a un chaval que no paraba de tirarles latas con arena dentro (tan pocas balas…), miles de empujones, la garganta muda de tanto gritar, los ojos mareados de aguantar las luces que parecían de discoteca, las bromas de Aitor con la parafernalia de S.A. (les dieron las gracias por dejarles las 16 pantallas de adorno y dijeron que iban a subastar una púa que tenían de ellos en ebay por 50 euros)… Y un tema nuevo que saldrá publicado en un disco recopilatorio que están preparando Def Con Dos con unas cuantas versiones de colegas de lo más variado. Era la primera vez que oíamos ese “Mineros Locos” y la sensación fue un tanto rara, aunque enseguida se encargó Aitor de quitarle hierro al asunto comentando con ironía la alegría que les daba participar en el proyecto con artistas de alta alcurnia.

Para que luego no digan que no sé escribir y que no tengo ni puta idea (hay cosas que se graban a fuego en la mente y no se olvidan nunca por mucho tiempo que pase) pondré un buen número de las canciones que tocaron, que fueron entre otras: “Detector de gilipolleces”, “Horóscopo”, “Fuimos ikastoleros”, “Pastel de costo”, “Gafas de pasta”, “Marido y mujerta”, “Drogopropulsado”, “Oso Panda”, “Hotel familiar”… Bueno, ya son bastantes, ¿o no?, tampoco es cuestión de poner las 40, ¿o sí?, yo creo que no, ¡jajajajaja!.

Como solía decir mi abuela todo llega y todo pasa y la noche se acabó casi sin darnos cuenta.

  
Lendakaris Muertos
 

Para despedirnos de este estupendo festival hasta el año que viene quiero hacer mención a algo que me dejó sorprendida. El hecho es que casi todos los grupos, quisieron agradecer el esfuerzo a la organización del festival y expresaron su gran deseo porque aquello continuara por los siglos de los siglos. Y entonces me quedé yo pensando que era normal ser agradecido pero que en tanto exceso tal vez quisiera decir que había pasado algo.

Tal vez haya que callarse la boca y volver a tragarse la libertad de expresión con patatas o tal vez haya que enseñarle a hacer comentarios de texto de 8º de EGB de las canciones de S.A. y Lendakaris Muertos a algún teniente alcalde del Partido Policial, porque debe ser que más de 50 años después quieren prohibir las reuniones, los conciertos y la cultura en general para aprovechar la financiación que reciben éstos en otros intereses propios.

Ya vale de no escuchar, de no entender, de no comprender. En vez de tratar de joder a festivales que han conseguido que las fiestas del valle sean más que conocidas y llevar miles de personas, en vez de todo eso, que les “honra” y pone a cada uno en su sitio, podrían simplemente rascarse los cojones y dejar de tocárselos a los demás.

Desde aquí todo nuestro apoyo Sociedad Cultural y Deportiva Rebujas, a toda esa gente que ha hecho posible tantas noches irrepetibles, y que además año tras año nos enseñan la cara bonita de la música mientras ellos se comen los marrones y llevan en sus entrañas y en su cabeza la carga de lograr que todo salga bien.

  
Ambiente
 
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