La discoteca Circulo Culture Club gasteiztarra suele acoger muy esporádicamente conciertos y a lo largo de su historia ha recibido a grupos como Saratoga, Barón Rojo o los propios El Ultimo Ke Zierre, que se subieron a las tablas de esta sala hace dos años para presentar ”Quemaste tus alas de ángel”.

En esta ocasión, los habituales DJ´s que copan la programación de la sala dejaron paso a Distorsion Toxica y EUKZ. En principio los encargados de compartir escenario con los levantinos iban a ser Vuelko pero, debido a problemas de salud de uno de sus integrantes, finalmente fue una principiante banda gasteiztarra la encargada de completar el cartel.
 
El espectáculo prometía, y hasta el lugar se acercaron numerosas personas. Muy probablemente la afluencia de público se vio reducida debido a que ese mismo día en la Sala Jimmy Jazz tenía lugar la actuación de Txarrena que presentaba su “Azulejo frío”.

Los encargados de poner a tono al personal fueron Distorxion Toxica o D-TOX. Una joven banda creada en el año 2009 y que con la influencia de grupos tales como Segismundo Toxicómano, Rancid o Soziedad Alkoholika esta dando un buen numero de conciertos por la zona norte.

A lo largo del concierto, cuya duración fue de cincuenta minutos, el cuarteto derrochó ganas, pero padeció diversas carencias propias de los nervios y la inexperiencia.

Su repertorio estuvo marcado por la interpretación de buena parte de los ocho temas que forman la maqueta con la que cuenta el grupo, “Franfur”, “Desconecta” o “Vigilados” fueron alguno de ellos. Se marcaron la versión de “Nadie es inocente” La Polla Records y con “El Sacamantecas” dieron por finalizada su actuación, algo que a los presentes no convenció y pidieron con insistencia nuevos temas.

Los de Vitoria, próximamente se encerraran en el estudio para grabar y dar forma a lo que será su primer LP. Podéis estar al tanto de sus noticias en el myspace de la banda.

Cuando faltaban escasos minutos paras las once y medía, el grupo de Castellón se dejo ver en el acogedor escenario de la Sala Círculo. Comenzaron con “La Burbuja” y “Refuckeado”, ambos temas del último disco, destripado durante gran parte de la actuación. El público reaccionó muy bien y el movimiento durante los mismos fue incesante.

Desde el principio, El Feo (voz), Pedro (bajo), Oscar (guitarra), Sam (guitarra) y Kusio (batería), se mostraron contundentes y con ganas de agradar a sus seguidores y a su vez, de dar respuesta a las numerosas ovaciones que estos le brindaban. Les vimos más habladores y participativos de lo acostumbrado, especialmente al vocalista, que se mostró tremendamente cercano a sus fans.

Temas como, “Pídele al cielo”, “Somos violencia” o “A cara de perro” iban sucediéndose con fuerza mientras el respetable se lo pasaba en grande y los cinco músicos se mostraban provocativos y seguros.

Uno de los mejores momentos de todo el concierto se vivió en la interpretación de la incansable “Soldadito español”, el público enloqueció y fue cantada al unísono de principio a fin.

Después de un breve respiro, llegó la hora de disfrutar con la rabiosa “No es amor (Adiós castigo)”, tema del nuevo disco en el que colabora Agnes, vocalista de la banda catalana Lilith, o con “Vuelta al infierno” e “Insurgente”, ambos temas coreadísimos.

“Veneno” fue el corte elegido para interpretar antes de tomarse un merecido descanso, llevaban tocando alrededor de una hora, y en ese tiempo apenas hubo pausas. Regresaron brillantemente con “Sobreviviendo”, versión del cantautor argentino Víctor Heredia, tema que podéis escuchar aquí. A esta le siguió “Canto”, tema dedicado a Víctor Jara y en el que se incluye un fragmento de la última canción de éste y “Vuelvo a Santiago”, con la que se dio por finalizado el repaso al último trabajo de la banda.
 
Escasos minutos antes de la una, con “No tengo miedo” concluía un atractivo show, en el que el grupo levantino puso toda la carne en el asador, realizó un repaso por todos sus discos y gozó con la compañía de unos fieles seguidores que despidieron al grupo con una sonora ovación.