En esta ocasión, asistimos al concierto de Talco y La Mâquina en la Sala Caracol. Llegamos con una hora de antelación y ya había unas colas impresionantes para recoger las entradas, de hecho, pudimos hablar con gente que llevaba allí desde las siete y media de la tarde, y es que Talco, se han convertido en una revolución en todos los sentidos.
La gente ocupaba las dos mitades de la calle y el desfile abarcaba ambas esquinas del edificio, menos mal que se lo tomaban con humor. Como pudimos, nos hicimos paso entre la vorágime de gente para poder llegar a ver a La Mâquina, teloneros de Talco en esta gira por el estado español.
La Mâquina han sido para mi una sorpresa, un compendio de músicos de distintas nacionalidades (Berlín, Roma y Girona) que tienen un fin en común: la denuncia social, el compromiso y el activismo. Podemos decir de esta formación que es un grupo de combat rock, con influencias punk, hip hop, ritmos jamaicanos… un batiburrillo de estilos que hacen que, cuanto menos, llamen la atención. “Este proyecto con vocación internacionalista” (como ellos mismo se definen) cantan en castellano, italiano, inglés, alemán…
La Máquina
De la mano de Talco nos presentaron “… Acción”, su primer disco de estudio, grabado en los estudios Garate, en Andoain (Gipúzkoa) con la colaboración de Fermín Muguruza y Def Con Dos. Mirando al escenario no se nos hicieron extrañas las caras de algunos de sus componentes y es que, estos músicos están más que trillados encima de la palestra.
Sus dos cantantes, los italianos Sandokan y Rude, son miembros de Banda Bassotti y La Kinky Beat respectivamente y el resto de músicos, tampoco son nuevos, ya que han formado parte de Burman Flash, Net Flanders, Kitsch, Möondo, Gazpacho, Discípulos de Otilia...
Cada tema que pudimos escuchar fue una historia distinta, un ritmo distinto, un estilo cambiante en cada acorde. Son irreverentes, agresivos musicalmente hablando, tienen gancho y un perfecto castellano que nos dejó bastante sorprendidos y saben hacer muy bien su trabajo. Llegaron a mezclarse con el público que, aunque era escaso debido al follón que había en la entrada, estuvo a la altura de las circunstancias y supo dar a la banda el calor que se merecen.
De todos los temas que tocaron, destaco “La Mâquina” que da nombre a la formación y “Long Road” tema que habla contra la violencia de género y que, sumada la letra a la fuerza con la que la cantan, cobra mucho más sentido en estos tiempos de violencia incomprensible.
La Mäquina
Aún con el ritmo en el cuerpo y con un cambio rápido de instrumentos saltaron a escena los venecianos Talco. Para los que no lo sepan, son una banda antifascista y antirracista que hacen ska-punk y que según palabras del propio grupo “creemos en la independencia de la música y en el mensaje que ésta debe enviar contra todo tipo de discriminación”.
Vienen de una Venecia industrial, concretamente del barrio de Marghera, donde se dejan de lado los paseos en góndola para coger el remo del panfleto y la revolución obrera. Una vez presentados, aunque sea brevemente, diremos que hay que vivirles para juzgarles.
Es la segunda vez que tengo la suerte de verles en concierto, y puedo decir lo que a primera vista no me dejó duda: son puro fuego sobre el escenario, un carnaval en cada canción, un subidón de adrenalina que hace que el público se desinhiba y cante y baile de la forma más grotesca que a uno le salga de dentro, sin máscaras venecianas, a pulmón y con las suelas de las playeras bien curtidas para no caer en el intento, que más de una caída vimos en la Sala Caracol en mitad de un inmenso pogo.
Más de doscientas personas se quedaron fuera de la sala y sin entrada por problemas ajenos al grupo. Los Talco pidieron disculpas a través de su página en feisbuk con el siguiente comentario que copiamos y pegamos: “Lo sentimos mucho por el concierto en la sala Caracol donde, Por culpa de la organizacion,200 personas han esperado a fuera sin veder el concierto.un saludos espezial y un abrazo a todas estas personas, nos vemos adelante,asta la proxima”.
Talco
Talco han agotado entradas en salas legendarias como el Indra Club de Hamburgo y han encabezado el Stemwede Air Open ante 7000 personas, así que qué esperamos nosotros, pobres mortales, metiéndoles en una Sala tan modesta como la Caracol, modesta, en comparación con el resto de sitios donde han tocado. No estoy excusando ni mucho menos el problema que hubo con las entradas, no se calcularon las dimensiones del evento ni la repercusión que tiene un grupo como Talco.
Aunque su último trabajo ya tiene un tiempo, vinieron a presentárnosle. Se editó bajo el nombre de “La Cretina Commedia” y cuenta la historia de Guiseppe Peppino Impastato, hijo de un mafioso siciliano que renegó de su padre y se convirtió en un activista antimafia. Fue asesinado por esta en 1978 y su vida fue llevada al cine. Pese a que Talco son un grupo conocido internacionalmente, este disco no ha sido editado en nuestro país, así que sólo se puede comprar en los conciertos que la banda está dando en nuestro estado.
Temas como “Correndo Solo”, “Al Carneval”, “La Cretina Comedia” o “La Mía Terra” fueron dando forma al espectáculo. No pudimos parar de saltar ni un momento, no nos dejaron, es imposible no dejarse llevar por el dinamismo y la alegría de estos músicos. Esperamos volverles a ver muy pronto por nuestro país para volver a repetir otra experiencia inolvidable. Sempre Talco!!