El pasado 6 de febrero tuvimos el placer de estar en la sala Penélope de Madrid para poder disfrutar de uno de esos conciertos que se te quedan guardados como si hubiese sido el primero, y no era para menos.

Empezó puntual a las 20:15 con los madrileños Sonotones, encargados de abrir la velada con un concierto de unos 45-50 min, en el que nos deleitaron con temas como “Ni contigo ni sin ti”, “Europa esta matándome”, “Que escéptico” o “Ya no es lo mismo”. He de decir que aunque hacía tiempo que nos les veía en directo, me dieron la sensación de ser más maduros en el escenario y mucho mas entregados con el público que allí nos encontrábamos. 

Y eso, pese al problema que hubo con el horario, ya que en las entradas ponían que  empezaban a las 20:30, ya se encargaron de mover por las redes sociales el adelanto de la hora a las 20:15. A pesar de ello congregaron a gran número de seguidores  coreando canciones como “El progreso”, una versión del brasileño Roberto Carlos que ánimo bastante al personal.  Siguieron con “Lo tienes que probar”, “Queremos mandar”, “La culpa fue de la ciudad” cerrando con “Solo tienes una vida” de su último trabajo “Salta la banka”.

Llegaba la hora y aparecían en escena  Txus Mariví a la guitarra, “Flako” al bajo, Brigi Duque a la batería y Enrique Villareal “el Drogas”. Con una sala llena hasta la bandera y con muchas ganas de pasárselo bien.  Empezando con “Como son” y siguiendo con temas de Barricada como “Sofokao”. Con “ya no anochece igual” o “Nos hace morir” la gente entraba en calor y allí no se movía ni el apuntador si no era para bailar a ritmo de estos grandes músicos.

Un repertorio muy bien escogido  y que se asemeja a una especie de Wikidrogas de toda su carrera musical. Lo mismo te tocan un clásicos de Barricada, y la gente se vuelve loca (no es para menos) como “Animal caliente”, “Barrio conflictivo” o como en “Oveja negra”, donde casi se escucha más a la gente del publico coreando que a la propia voz de Enrique. Pero es que suena especial de la mano de sus nuevos acompañantes, sí, lo sé, no es lo mismo, pero a mi casi que me gusta más que Barricada. 

También hay lugar para nuevos temas como los de los discos de ”Demasiado Tonto el la Corteza” donde pudimos escuchar “Nos hace morir”, con la ármonica en “Están para violarlas”, “Que mal rato” o una de mis favoritas y que me da muy buen rollo “Debajo de aquel árbol”. Aun a ritmo imparable también había momentos mas relajados como con “Cordones de mimbre”  y momentos reivindicativos y de protesta como con “Peineta y mantilla” que en Madrid como que pega mucho. No nos olvidamos de Txarrena con “Ya no anochece igual”, “Asi”, “Frío”, “Todos los gatos” o  “Empujo pa´ki”.

Y es que da igual cuantos años tenga la canción. Tanto si es un clásico como si acaba de salir, la gente coreaba las canciones al unisono y se respiraba un buen rollo especial, bailando unos con otros aunque no se conocieran, pero es que la buena música une.

Cuando todo empezaba a oler a final nos ofrecieron 4 temas más donde se volvieron a mezclar épocas de lo que yo le he llamado el Wikidrogas con “La silla eléctrica” uno de los temazos de Barricada y “Víctima” dando paso a Txarrena con “Azulejo frio”. Con “Otros Tragos” se fueron todos los músicos de paseo, con el bombo al hombro, cantando entre el público como si se tratara de una comparsa. La verdad es que siempre nos regalan una nota de sorpresa en sus conciertos, bastante divertida, por cierto.  No se si llegaron a salir a la calle, pero hubiera estado divertido salir todos detrás acompañando y cantando como si de pasacalles se tratara.

Nada más y nada menos que 30 temas compusieron este fantástico concierto con casi 2 horas de actuación prácticamente sin parar en la que no tengo más palabras que decir. Dar las gracias Txus, “Flako”, “Brigi” y al “Drogas” por hacérnoslo pasar tan bien disfrutando de la música en directo. Si no pudiste asistir no te pierdas los próximos conciertos, andan sueltos por toda la península. Un espectáculo digno de ver y de escuchar. Son  muchos años los que El Drogas lleva en el mundo del rock y cada vez se supera más y mejor.