Como dice el refrán Zamora no se tomó una hora, nosotros nos pegamos un viaje de algo más de tres para llegar a la ciudad. Pero había llegado el momento de que los miembros cántabros de Insonoro fuesen a este festival. Este año ya nos tocaba vivir la experiencia, por una parte por el cartel tan atractivo y variado que presentaba la V Edición del Lijabarda, y por otra porque ya llevan un par de años insistiéndonos en que fuésemos, así que para conseguir que nos dejaran de dar la chapa, ¡jajaja!, allí nos plantamos. Y la verdad es que no me arrepiento en absoluto, es más repetiremos el año que viene si es posible.

Este año el Lijabarda tomaría Zamora durante 10 horas en el aparcamiento de la Ciudad Deportiva, además la zona de acampada era gratuita, justo detrás del escenario, cosa que es de agradecer, y en un marco incomparable, a orillas del río Duero.

Allí estuvimos un buen rato, viendo cómo llegaba la gente y disfrutando de unas bebidas espirituosas mientras esperábamos a que comenzase la fiesta.

A las 5 de la tarde se empezó a repartir el bacalao, y todos los grupos salieron a tocar con una puntualidad digna de mencionar. Y es que yo de la cosas que más odio son los retrasos, sobre todo en los festivales, así que un 10 para la organización por respetar y cumplir los horarios.

Y ya que hablamos de la organización, para seguir con los puntos fuertes, que fueron muchos, el primero de ellos que quiero resaltar y que me parece fundamental fue la seguridad. Cumplieron su labor a la perfección e hicieron un trabajo excelente, por lo menos yo me quedé más tranquila viendo que la gente no podía meter botellas. Aunque como siempre hay solución para todo, las dejaban meter cortadas. Me parece un acierto, la verdad es que a mí no me gustaría acabar en el hospital porque algún insensato me tire una botella a la cabeza.

Me sorprendió lo amables y lo bien que trataban a la gente los encargados de la seguridad. En más de una ocasión, uno de los que estaban en el foso dio cigarros a varias personas del público, cuando podían haberles mandado a freír espárragos perfectamente. Por otro lado, a los que llevábamos mochilas nos pedían con el mayor de los respetos que les enseñásemos su contenido. Aparte en un momento en el que hubo mucho viento se cayeron las rejas metálicas, y no tardaron ni dos minutos en volver a colocarlas.

El segurata de la zona de salida se lo debió pasar como los indios porque había colocado un carrito de la compra con su bidón gigante de vino, y sonreía mientras veía cómo la gente salía con los vasos para recargarlos. También se echó unas buenas risas cuando un chaval intentó cumplir con sus funciones diciéndole que unas chicas que iban a entrar “estaban limpias”.

En fin, que aquello de represivo no tuvo nada, y me he extendido tanto con este tema porque he visto en el foro del festival que alguien se quejaba de la seguridad, y sinceramente me parecen ganas de tocar las narices. Todo el día protestando, pero seguro que si a él le hubiese pasado algo por falta de un cierto control no habría escrito su mensaje con tanta chulería y falta de respeto.

Por otro lado opino que estuvo genial que dejasen meter bebida al festival, la verdad es que cada vez se ve menos, y si la gente no tenía para cortar las botellas, la zona de acampada estaba a un tiro de piedra. Por ejemplo 6eiskafes hicieron gala de su buen humor y en un momento de la actuación se dieron la vuelta para decirle a la gente más o menos que en vez de verles el culo diesen la vuelta para verles de frente.

Aparte hay que agradecer a la organización el buen trato recibido en todos los sentidos, y que dejasen hacer fotos en el escenario. Se portaron de lujo, tanto con los periodistas como con los grupos, y esto último lo supongo porque no hubo ni una sola banda que no les mencionase durante su actuación, especialmente al Lija (Rubén).

Bueno, y ahora a comentar el festival…

Los que sí que no paran son los 6eiskafes, así que para los que se divirtiesen con ellos, que no fueron pocos, estarán contentos porque este verano van a tener la oportunidad de verles unas cuantas veces en varios festivales, como el Kalistrorock (en Murcia), el Tirgorock o el Aupa Lumbreiras, y en las fiestas de bastantes pueblos.

Siguen presentando su primer disco “De Cartera” y lo dieron todo sobre el escenario, además de “amenazar” con repetir en el Lijabarda si el año que viene la organización quería, se les veía más que encantados.

Nos dejaron un buen puñado de temas, que consiguieron reclutar bastante público, encantado de volver a pogear y moverse sin parar.

Y es que la gente no  pudo oponer resistencia a los ritmos de “Ska-k”, “Hartos”, “Cierra los puños”, “Que buena”, “Pegamento”, “Cantarranas”, “Paga” o “Psikiatriko”.

Bueno, la gente, y yo tampoco por supuesto, y es que ante un grupo que muestra tanta proyección y potencial es más que difícil no dejarse embaucar. Los aplausos fueron más que sonados cuando se despidieron de todos como se suele hacer en una buena obra de teatro al acabar la función.

Después de la fiesta de los vallisoletanos le llegó el turno al rock de Listea. La banda se formó en 2004 en Madrid y cuatro de sus cinco miembros son de Zamora.

La verdad es que se les veía más que ilusionados, no sé si era por encontrarse en su tierra natal y por la emoción de estar allí, porque el cantante no paraba de abrazarse con todos los miembros del grupo.

Para ser sincera debo reconocer que el concierto lo vimos como telón de fondo de unas cuantas risas y una magnífica conversación, pero a pesar de no prestarles toda la atención del mundo sonaban bastante contundentes y mostraban en el escenario mucho aplomo.

La banda afincada en la capital del reino ha grabado en 2006 una maqueta, de título homónimo a su disco, y un segundo trabajo que lleva por nombre "Paños fríos de aguardiente", me parece que además también presentaron algún que otro tema nuevo, así que tenían unas cuantas canciones que desgranar…

Nos dejaron una buena muestra de su música con “Cuentos de palo”, “Esto va a reventar”, “Decadencia es mi canción”, “Paños fríos de aguardiente”, “Daniela”, “Respirando azufre” o  “Guerreros de bar”, por poner algún ejemplo.

Además tuvieron el acierto de repartir pegatinas de la banda, una buena idea para que a los cotillas como yo al día siguiente no se nos olvidase entrar en su web (www.listea.com) y en su myspace (www.myspace.com/listearock).

Después llegaron un par de platos fuertes de esos que te dejan saciado, primero Luter y a continuación Benito Kamelas.

El concierto de Luter creo que fue el que más corto se me hizo, casi ni me enteré. Pero allí estaban los tres, la voz cantante, Jandri y Fauno, para llenar la tarde-noche de las melodías, de los colores de sus poemas hechos canción.

El trío nos encandiló una vez más, pero aquella ocasión fue especial porque era la primera vez que les veíamos en un festival, y consiguieron de nuevo colmar todas nuestras expectativas.

En directo siguen dándole caña a “Añicos”, de reciente publicación, y del que podréis encontrar numerosas críticas, por ejemplo en nuestra web, vamos a darnos un poco de publicidad, ¿no?, ¡jajajajaja!.

Como bien dije en la reseña me llenan el corazón, mientras Fauno rasga el bajo, Jandri sacude los platos y Luter recita exquisiteces se me abre el alma, parece que cada uno de ellos toca con las puntas de los dedos lo más profundo de mi ser. Yo me rebelo en un arrebato por intentar no pensar y no sentir, pero es imposible, porque sus canciones siempre me traen buenos recuerdos, cada vez que las escucho me trasmiten cosas diferentes y me llenan más.

El párrafo anterior parece un burdo intento por resumir lo que ellos tan bien son capaces de decir, y realmente lo es, nunca pretenderé estar a la altura de las circunstancias devolviéndoles palabras semejantes a las que ellos nos dedican con sus temas, pero sí me mantendré al pie del cañón para empaparme de todas ellas.

Así que no pude parar de corear estas pequeñas obras de arte echas canción, llenas de frases que lo dicen todo con cuatro palabras, y que se resumieron en “Esperpento”, “Hoy voy”, “Fin” y “Objetos perdidos” para cerrar, espero que ellos no se pierdan nunca, y ojalá que dentro de poco nos ofrezcan la segunda parte de una trilogía que acaban de comenzar.

También disfruté muchísimo con “A Granel” y “Entre La Maleza”. Y por supuesto no pudo faltar un pequeño homenaje a Los Reconoces con “Atrapado”.

Resumiendo, toda una experiencia ver a Luter en directo, todas las veces es como siempre y como nunca, ¿puede haber una descripción más ambigua?, creo que no, pero esa es la sensación que siempre me dejan, como si fuese la primera vez.

Entre pitos y flautas se nos olvidó quién iba a tocar después, eran los Benito Kamelas, ¡qué alegría, qué alboroto!. Se nos presentaba otro gran conciertazo.

Los valencianos fueron los que más público lograron convocar junto a Hora Zulú, y eso se notaba en el ambiente.
Fue toda una fiesta que comenzó con dos canciones de su último trabajo, “Sueños con traje de tinta”: “Furgoneta” y “Volver a empezar”. Aunque no fue de éste del que más derrocharon, sino del anterior, que mostraron abiertamente y “Sin trampa ni cartón”. De aquí nos dejaron un montón, y sonaron enérgicos y vitales como siempre. Yo ya me moría por escucharles, me parece que llevaba un año aproximadamente sin disfrutar de ellos en vivo, desde el Derrame del anterior verano.

La primera que sonó del trabajo publicado en 2005 fue “Loko”, que vino precedida por algunas de las más antiguas de todas las que escuchamos, “Cocaína”, y luego “La Farola” y “Destino” de “Por costumbre”, así enlazaron unos cuantos temas bastante antiguos y que fueron muy bien recibidos.

Después ya se explayaron con “Sin trampa ni cartón”, no me extraña, porque es todo un discazo, y los Benito Kamelas nos cantaron en primera persona, para decirnos: “He decidido”, “Fue mi abuelo”, “Ayer soñé”, “Aquellas cosas que solíamos hacer” y además “Y no cambiamos ni un solo minuto”.

Y poco más se puede decir, con esos temas se desató la locura y la expectación fue total, el público no pudo más que responder como el momento lo merecía.

Para acabar, la última, fue de “Cañas y barras”: “Valencia ciudad” y un saludo hacia Insonoro.com!!! cosa que recibimos con sorpresa, admiración y agradecimiento.

A mí me dio hasta pena que se bajasen del escenario, pero bueno, aunque tengamos que esperar un año, seguiremos aguantando impacientes hasta la próxima cita.

Para cerrar la noche Después de todo y Hora Zulú. A los primeros no había tenido el gusto ni de escucharles ni de verles nunca en directo, y me parecieron apabullantes y atronadores, ¡vaya cera que repartieron!.

Los maños Después de todo sonaron cañón y nos dejaron atónitos con su rotundidad y con su metal y su hardrock más que fuerte y contundente, era imposible no dejarse pervertir por el carisma del vocalista y por la banda que provocaba un efecto inmediato: saltos y más saltos.

Me dejaron a cuadros y eso que este tipo de estilo no es que sean el santo de mi devoción, pero este grupo promete mucho.

Para muestra basta un botón de los siete que hay colgados en www.myspace.com/despuesdetodozaragoza, estoy segura de que os van a encantar.

Después de todo hizo gala de unas formas excelentes y nos presentaron temas de su segundo y tercer  y último disco, recientemente publicado.

De su segunda obra, "Un Minuto Más", nos dejaron “Rencor”, “Un futuro mejor”, “Reflejo de locura” y “En llamas”.
Del más nuevo, nos ensordecieron con “La voz de la inocencia “Qué pretendes”, “La espiral”, “Vuelve a mí”, “Despertar”, “Hijo de un Dios menor” e “Inmortal”.

En fin, un conciertazo que seguro que dejó a más de uno con la boca abierta.

Para cerrar la noche y este gran festival llegaron los andaluces de nacimiento, ya todo el mundo sabe de quién hablo, ¿no?, pues sí Hora Zulú.

Empezaron su actuación con el primer tema de su anterior trabajo, “El que la lleva la entiende”, dejándonos “Coplas de negra inquietud”, a éste le siguieron unas cuantas del nuevo, “El alma y los pies”, “Suficiente Moraleja” y “Toma y obliga”, y allí paramos de contar, porque de  "Creer Querer/Querer Creer" fueron las únicas que tocaron, curioso, ¿no?.

Continuaron con “Ya que te pierdo” y “Camarada”, para luego explayarse con unos par de temas de su primer disco, “Me duele la boca de decirlo”: “Y no protesto”, “En El Lugar A Estar”. A éstos les siguió el homenaje a  "Crisis De Claridad" con “Tus ganas de ganar”, “De-Querer-se”, “Con mi condena”, “Volvió a darme por buscar” y “Tanto que perdí”.

Para ir finalizando nos dejaron “Golpes de pecho” y “De vivir sin ti dos días”. Como broche de oro y es que ya les dolía la garganta: “Tango”, “Agua de Mayo”, “Andaluz de nacimiento” y “A ver si me entiendes”.

En fin, ha sido todo un placer estar en este gran festival amenizado por unos grupos estupendos y por una compañía aún mejor.