14 discos en 19 años avalan a los castellonenses El Último Ke Zierre. Esta noche venían a presentar a Cantabria el último de ellos, “La burbuja”. Yo iba con ciertas reticencias, porque es un disco que no me ha gustado demasiado, pero la cosa en directo cambió y las canciones sonaron mucho más atractivas que en el plástico.
A pesar de la poca difusión del concierto se acercaron varios centenares de personas, y no sólo de Cantabria, sino de también de Asturias, del País Vasco, y seguro que de algún otro lugar también.
En un principio dudamos de la asistencia del público, entre otras cosas porque finalmente el grupo no iba a tener teloneros, todos esperábamos hasta esa misma semana que tocasen The Birras. Pero aquello fue un poco desastroso, primero creíamos que la banda iba sola, luego que les acompañaría el grupo cántabro (al que teníamos muchísimas ganas de ver) y luego sin saber por qué se volvió a la situación inicial.
Además el precio de la entrada parecía un poco excesivo teniendo en cuenta que se les ha podido ver unas cuantas veces en verano y gratis, y es encima tocaban solos. Creo que es de las pocas veces, por no decir la única, que he visto a un grupo que él solito se lo coma y se lo guise todo, lleve el tiempo que lleve y haga el tipo de música que haga.
Pero por suerte parece que esta banda atrae tanto que no hay crisis que pueda con ellos. Ahora eso sí, pudimos ver algunos espectadores menos que hace dos años. La sala se llenó poco a poco, seguro que muchos contaban que iba a haber otro grupo que caldeara el ambiente y también algunos trabajarían hasta tarde.
Ambiente
A las diez en punto se subieron a las tablas El Feo, Cone, Oscar, Sam y Kusio. Los cuatro fueron los culpables de que pasásemos una hora y media de infarto. Sin duda fue una de sus mejores actuaciones dentro de lo que recordaba últimamente, y me convencieron totalmente, porque en un par de ocasiones que espero poder olvidar pronto con conciertos como éste, estaban como para echarles de comer a parte.
Lo dieron todo y se metieron al respetable en el bolsillo. Consiguieron conquistar a un público, con el que conectaron en todo momento, y que estaba ávido por pegar botes y por corresponder a El Último Ke Zierre como se merecía.
Aquello empezó con tres temas de su particular burbuja, con el tema que da título al disco, que se sabían al dedillo todos y cada uno de los asistentes, y con “El juego de los alguien” y “Refuckeado”.
Estábamos en medio de un concierto frenético y sin concesiones ni demasiado tiempo para las palabras vacías de sentido. Aunque sí que nos dedicaron algunas y dieron las gracias porque estuviésemos allí, nos desearon salud y nos agradecieron el respeto que les estábamos mostrando.
Después de desgranar algunos de los temas nuevos nos recordaron que “Yo también puedo ser malo” y que “Fausto fue a la habana”.
El Ultimo ke Zierre
El público enloqueció con “Soldadito Español”, “A dónde vas?”, “Escupiré jodidos”, ”Hachís”, “Vuelvo a Santiago”, “No tengo miedo”, “A cara de perro”, “Tus bragas” y “Pídele al cielo”.
Y es que si El Último Ke Zierre brilló con luz propia, el público no se quedó atrás, creando entre todos un ambiente espectacular.
Finalmente hicieron mutis por el foro para acabar de rematar la faena con “Vuelta al infierno”, “Veneno”, “Mis calzones” y “Hasta que pierda la voz”, con la que cerraron su brillante actuación.
Aunque fue una pena que no complaciesen a los asistentes con “Vis a Vis”, pues no pararon de corear su título entre todas y cada una de las canciones.
Puestos a pedir se podían haber marcado media horita más de concierto. Pero bueno, ya se sabe que nunca llueve a gusto de todos.
Y aquello finalmente se acabó con casi una trentena de canciones, que se nos pasaron tan rápido que habríamos sido capaces de ver el concierto entero un par de veces más, y con las que El Último Ke Zierre demostró que está más vivo que nunca.
La impresión general fue excelente y todo el mundo salió de la Sala Heaven más contento que unas castañuelas.