Los madrileños The Virgo Superclusters nos presentan su primer disco "El Replicante Imperfecto", un trabajo editado por el sello madrileño Lengua Armada, dirigido por nuestro amigo Nano Ruiz (Deniro), con más de 17 años militando en la independencia absoluta.
Un disco de 9 canciones que llega de la mano de una banda donde milita el ex-bajista de Deniro, Frank Ivan y que ha querido afrontar ahora su proyecto en solitario tras años de batallas en bandas como Sintesis, Freakmind, o Warrior Poet.
Un universo sonoro creado desde la psicodelia, stoner rock o electrónica espacial capaz de buscar esa capsula sonora de unir artes plásticas con un fondo musical de lo más experimental, y tal vez, dar forma a una banda con una personalidad única, capaz de transmitir esa búsqueda de un espacio ideal para llegar lo más lejos posible.
De tal manera que Frank Ivan se colgara de nuevo el bajo, y se fortaleciese con el uso de sintetizadores para subirse a un barco acompañado por Norin Radd (Pablo Peláez de Mazzadonia) al mando de guitarras y samplers, Esther Mazzadonia (Mazzadonia, Barbara Black) en el puesto de cantante, además de involucrarse con guitarras, pads y percusiones. Para pasar al puesto de batería, con Nando Barrios (Sexy Looser) y un último tripulante, capaz de estar ocupado con las guitarras orgánicas, John DeFool (Juanma Guijarro de Sybiliam).
De tal manera que el disco fue grabado, mezclado y masterizado en Rec Disease Studios por César Berzal en abril de 2017, y ha contado la colaboración especial de Kurt Savoy (Curro Savoy) "El Rey del Silbido" conocido por su participación en el Spaghetti Western en el tema "Diligencia a Ningún Sitio" y César Berzal en "Perdidos en Andrómeda", "Diligencia a Ningún Sitio" y "Callos de Pico y Pala".
Concentrando un universo sonoro capaz de ir conquistando melosidad, y una apuesta por un contraste continuos de espasmos y juego electrónico donde su concepto musical por lo sinfónico está muy presente en el transcurso del disco. Empezando a cosechar una cercanía espiritual y celestial desde el primero de los temas, "Luna Embrujada", que ha servido como primer tema adelanto y primer videoclip, narrando la historia de tres brujas del desierto que a través de un aquelarre despiertan a una deidad mágica para transmitirle el poder de la empatía a una persona vacía, vana y egoísta, haciéndole ingerir amanita y peyote, sustancias alucinógenas que pasara a formar parte del siguiente de los temas como es "Peyote", tema de espíritu más post punk, que dejara narrada las peripecias de un viaje surrealista que vive este personaje, al que las brujas han dado el aquelarre. Formando parte de una conceptual historia que va a ser capaz de hilar muchas de las canciones del disco.
"Perdidos en Andrómeda", otro de los temas capaces de ingerir una concepción y muestra más uniforme de la capacidad de la banda, de transformación hacia un horizonte más cósmico y espiritual. Volcando una elasticidad por las melodías en "Mundo Loco" y expulsar un mensaje solemne de lo que el planeta Tierra piensa de todos nosotros y de los males que le provocamos. Quedándonos absortos y atrapados por uno de los grandes temas de este disco y seguramente su segundo single más potencial.
Llegando a expandir su faceta más electrónica y experimental de lo que estábamos llevando hasta ese momento, con "Pulsar", corte instrumental y electrónico, capaz de pasar desapercibido y punto de inflexión en la escucha del disco, un corte que rompe por completo este trabajo. Volviendo a neutralizar su onda expansiva rápidamente, con "Diligencia a ningún sitio" con sonidos de western rock, dulces silbidos y coros adornando esa nube cósmica de contrastes muy tarantinos.
Golpeando con contundencia y muestra rockera, con sabor a bourbon y hachís corrompido de inicio con el salvaje aullido de un lobo, y apostando por su muestra festiva y canalla, con el tema "Luces Rojas". Rodando más diversidad al disco con sonidos de psychopunk, "Billie Dean" y aflorar su más letal sensualidad y juego de contrastes con el mundo indígena, con un mensaje de grito de libertad, con "Callos de Pico y Pala", un corte donde afloran los coros indígenas en estribillos, y el grito letal y directo por el mal de esta sociedad, en temas religiosos, y de conducta pasiva.
The Virgo Superclusters invaden psicodelia, lo transforman en rock espacial, y se inundan por otros ambientes sonoros de la forma más camaleónica y experimental.
14/12/2017 
