COLABORACIONES
 Reseña
 
Marc Galindo "Con un par de Cuernos"
  28/02/2018     
  Txutxy Cano
 
Si he de ser sincero, no conocía nada de la trayectoria de Marc Galindo, pese a llevar 12 años tocando música y haberlo hecho incluso fuera de nuestras fronteras, donde, según su hoja promocional, ha sido músico de soporte de la gran Tarja Turunen. Como se suele decir, a veces se es más conocido en el exterior que en casa de uno.
 
Marc Galindo, que ha colaborado con diferentes artistas y proyectos, además de haber formado parta de una banda como Staccatum, decidió ya hace algunos años comenzar su carrera en solitario muy joven, cuando contaba solo 21 años, hasta poder debutar 4 años después con este "¡Con un par de cuernos!", editado a finales del 2017.
 
Para este disco, además del propio Marc a la voz y las guitarras, tenemos a Rafael Escoté, veterano bajista que ha tocado en grupos como Pegasus, y Pablo Posa a la batería, también con una amplia trayectoria como batería de músicos con mucho nombre como Santiago Auserón. Como vemos, ha sabido rodearse de músicos experimentados que, a buen seguro, le habrán ayudado para dar forma a este trabajo.
 
La portada ya de por sí es una declaración de intenciones, obra de Lucas Baena Sáez, mientras la grabación ha sido realizada en los Kitflusound de Barcelona.
 
Pero vamos al fondo de estos nueve temas, que conforman este disco y que se abre con "Acróstico", una breve pieza a modo de introducción, con el sonido de una guitarra que acompaña a unos bellas frases, las cuales, como su propio nombre indica, dan forma a un acróstico, en este caso el nombre del protagonista del disco.
 
Ya con toda la banda al completo nos encontramos con el tema que da nombre al disco, "¡Con un par de cuernos!", que es una canción bastante pegadiza, con una base heavy metalera pero donde se pueden apreciar detalles más jazzísticos sobre todo en la sección rítmica. Un tema que habla sobre la consistencia para seguir hasta el final y poder conseguir tus objetivos.

Seguimos avanzando por el disco con "Tu verdadero yo", un tema que arranca sobre una base más hard rockera, con un sonido de guitarra persistente, que trata sobre aquellas falsas amistades que solo buscan su propio provecho, y donde la voz de Marc nos recuerda a los clásicos del Heavy Metal ochentero en nuestro estado. Se ve el mimo con el que se han querido mezclar sonidos más potentes con otros más melódicos, pero sin abusar de ninguno de los dos.
 
Bastante pegadizo es el estribillo de "Pura vibración", un himno de esos que imagino con toda la gente cantándolo a la vez, y que es un canto a lo que la música es para los amantes de la misma y lo que nos aporta tanto a los que están arriba como abajo de los escenarios. Lo dicho, un himno al Heavy Metal, y en donde Marc nos deja, una vez más, su calidad a la hora de tocar la guitarra.
 
Mediando el disco nos encontramos con "Viaje sin rumbo", una pieza instrumental, interpretada por la banda con mucha elegancia y que puede recordarnos a ese blues rock de los 60 o 70, con la que puede ser la mejor ejecución musical de todo el disco, sobre todo por parte de Marc que brilla de manera notable.
 
Un tema muy delicado es el que trata "Crueldad", como es el de la violencia de genero, tocado con mucha delicadeza tanto en lo musical como en la letra, uno de los puntos fuertes de este trabajo, partiendo de unas partes más tranquilas, para pasar a un estribillo más machacón, como para enfatizar la rabia que desprende la situación. Muy buen tema.
 
Ya he comentado anteriormente lo trabajado de las letras de Marc, y eso es una de las cosas más llaman la atención de "Entre rejas", un tema que trata sobre salir de esos momentos oscuros que todos tenemos en algunas ocasiones, todo ello con un enfoque que, musicalmente, puede recordarnos a esos medios tiempos del rock sinfónico estatal de los 70. Es de agradecer esos mensajes positivos que nos quiere trasmitir, culminados con un estribillo poderoso.
 
Vamos encarando la recta final del disco con "Mejor es actuar" que trata sobre todas aquellas personas que no hacen nada más que vender humo y que detrás no hay nada, un tema bastante más agresivo que los precedentes, pero sin salirse de su estilo propio, con un estribillo muy pegadizo y potente, y con las guitarras teniendo bastante protagonismo durante toda la pieza.
 
Y el disco concluye con "El gran momento", una pieza que nos lleva a ese momento que tanto has estado esperando y que al final llega, siendo una pieza con muchos matices escondidos, algo que es una constante en todo el trabajo, siendo un tema relajado, pero que al mismo tiempo nos tramite mucha energía.
 
Y así concluye este "¡Con un par de cuernos!", un disco que es el primer paso de una carrera que parece será bastante prometedora a medida que se vayan puliendo algunas cosas, como un poco más cohesión en las canciones, y, quizás, pulir ese estilo que esta buscando. Por lo demás los mimbres los tiene, sabe componer buenas canciones y, sobre todo, es un gran letrista. La voz, aunque con personalidad, bajo mi punto de vista, debería trabajarla un poco más para que no fuera tan lineal.
 
Por lo demás, nada que objetar, ya que si algo resume la música que nos trasmite este autor es calidad y actitud, y es que el disco te podrá gustar más o menos, pero no se puede negar que tiene buenos temas y que en ellos ha dejado toda su pasión, que al final es lo más importante. Importante darle varias escuchas para percibir todos los detalles.
 
Buen comienzo para una carrera que pinta bastante bien.
 
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