El pasado 25 de febrero se esperaba con ganas desde que conocimos hace unos meses la propuesta para esa noche en la pucelana sala Porta Caeli. Dos grupos asturianos venían a visitarnos, Desakato y Mala Reputación, y no podíamos dejarlos sin arrope ante el frío castellano. Pero hasta el tiempo acompañaba esa noche y eso favoreció que los alrededores de la sala estuviesen ya muy concurridos más de una hora antes del comienzo del concierto.

Iba a ver de nuevo a los Mala Reputación, así que acudí con el buen recuerdo que tenía de ellos y por fin después de mucho tiempo escuchando los discos de Desakato y de oír hablar de ellos también iba a verlos en directo. Se comentaba la buena venta de entradas anticipadas, cerca de las doscientas decían. Caras conocidas, gente venida de otras provincias y ganas de fiesta andaban por el barrio de Parquesol, así que llegada la hora prevista, todos a la sala.

Desakato empezaron puntuales, a las 10 de la noche, y salieron con mucha fuerza, toda la que lleva “África”, el primer tema de su último disco, seguida de “Mundo loco”, enchufados desde el principio, conectaron a la primera con el público. La sala estaba casi llena, seguramente superando los doscientos cincuenta asistentes, las intenciones estaban claras y desde el primer minuto pusieron a todos patas arriba.

Reivindicativos como sus letras continuaron con “Richter 7.5” y “En el ojo ajeno”, alternando así temas de sus dos álbumes, los cuales tuvieron presencia por partes iguales en el repertorio. El protagonismo evidente que ganó la grave voz de Pepo en el disco “Miseria, sangre y plomo” también tiene presencia en directo, y la verdad, ese juego de voces le da mucha potencia y personalidad al grupo.

Esa noche Desakato sufría la baja de su habitual bajista, Mario, que fue sustituido por otro amigo del grupo. Pero su ausencia era solo musical, porque andaba entre el público y salió a escena con sus compañeros un par de veces, eso si, con una mano vendada. Avanzó la noche con “Bajo la piel”, “Tu disfraz” y “Otro gramo”, y sin perder en ningún momento la velocidad conseguida desde el principio superamos el ecuador del concierto.

El peculiar sonido que da esa gaita que suena en sus discos apareció en contadas  ocasiones, como única representación de la sección de vientos, para dar otro aire a algunas canciones, como “El mio camín” y “Cada vez”, la primera de ellas cantada en bable, que seguro agradecieron los asturianos que había en la sala, que creo que eran unos cuantos.

Cañonazos como “Nuestra oportunidad” y “Octubres rotos” encarrilaban la recta final, saltos y empujones entre el animado público, y con “N’alcordanza” y “Los mineros”, también en Bable, se dio por finalizada la primera parte. Desakato abandonaron el escenario y anunciaron un descansito antes de que Mala Reputación tomase el relevo. Algo más de una hora de concierto en la que sonaron contundentes, convencidos, con la calidad de los grupos que llenan salas y agotan entradas. A mi se me hizo corto, ya voy buscando fecha para verlos en directo por segunda vez.

Tras unos minutos, en los que la sala quedó casi vacía (la polémica ley, supongo) las primeras notas de Mala Reputación dieron el último aviso a los fumadores más rezagados, y de nuevo volvió a hacer calor en la Porta Caeli. “Abriendo camino” dio el pistoletazo de salida a la frenética segunda parte del concierto, seguida casi sin pausa por “Caer de pie”, y es que a pesar del descanso la gente rápidamente recuperó el entusiasmo y mostró el fervor esperado.

Repasaron los que ya podemos llamar clásicos, como “Las mañanas”, “Gritar”, o “Las 2:00”, no olvidemos que Mala Reputación suma ya más de 10 años de trayectoria musical, en los que han ido forjando un público fiel que ha ido creciendo con ellos a base de directos y buen rock. A la vista estaba, los estribillos eran coreados por todos y se notaban las ganas que los presentes teníamos de verlos.

Los temas se iban sucediendo de forma natural, nadie parecía frenar el ritmo. Así disfrutamos de “El guardián”, “Bai de guei” y “Abuelo”. El ambiente derrochaba buen rollo por todos lados y así llegó esa divertida versión de los Ramones, “Lo únicu que quiero ye…”, otro guiño de nuevo a los asturianos que se hicieron un puñado de kilómetros para ver a sus paisanos.

Las enérgicas guitarras nos llevaron a “Para que jueguen los gatos” y “Dame más”, a la protesta de “Jarabe de palo”, para mi gusto de las mejores, que con la voz firme y convincente de Daviz deja muy claro el mensaje. No faltó “Iván”, de La Polla Records, habitual en sus directos siempre con muy buen resultado entre el público.

Está claro que lo suyo son los conciertos, se entienden con la gente, consiguieron varios pogos enormes en medio de la sala y no vi a nadie aburrido cerca mío en todo el concierto. Días después recibieron un premio al mejor directo, así que no creo que seamos pocos los que lo pensamos.

Con letras rebeldes e inconformistas hablan de lo que no les gusta, de lo que no están de acuerdo, de forma sincera y directa. Siguieron con “Septiembre 2003”, y después de esta invitaron a Pepo de Desakato al escenario que cantó con ellos “Reventando” y que le dio la garra que le caracteriza. Salta a la vista la amistad que une a estas dos bandas, que además comparten buena parte de público. Es cosa mía pero una gira conjunta daría que hablar.

Como suele ocurrir, quedan por sonar las más demandadas, que si lo son por algo será, así que para dar fin a esta gran noche no podían faltar “Salgo a buscar”, “Una noche más”, la impecable “Cristal” y como no, “Ansiedad” para la que decidí guardar la cámara y vivir el último pogo de la noche en primera persona. Una bendita guerra en la que nadie pierde.

De esta forma se despidieron los asturianos, dejando a pucelanos y visitantes con esa satisfactoria sensación que se tiene después de un gran concierto, en el que nadie bajó la guardia en toda la noche. Mala Reputación son un grupo maduro que sabe hacer las cosas bien y que espero sigan teniendo muchas oportunidades de demostrarlo. En abril verá la luz su 5º disco de estudio, que se espera con ilusión por sus seguidores, entre los cuales me incluyo, para el cual ya se prepara una gira de presentación. Estaremos atentos al calendario.