Desde luego los dueños de la Sala Cats no pueden quejarse de no haber llenado su garito aquella noche de Madrid. Esperamos cola y, al entrar nos contaron que ya había tocado el grupo telonero Zulu 9.30. Una pena, la verdad,  porque sí nos hubiera gustado escucharlos.

Saltaban entonces al escenario Canteca de Macao, no el grupo al completo, todos menos Ana Saboya, que salió momentos después acompañada por un sonoro aplauso que le daba la bienvenida a la encargada de poner esa voz tan dulce, y no por ello menos potente, que da una de las notas principales a la banda, junto a Isidoro, conocido como ‘’Chiki’’.  Desde el principio, Canteca demostró su habilidad para ganarse al público. La gente ya sabía a lo que iba allí, a disfrutar de una banda que consigue que te olvides un ratito de la crisis, del paro y de todos los problemillas que nos azotan actualmente. No puedes dejar de bailar, eso es exactamente Canteca. Ni dejar de entonar las letras de sus canciones y, si no te las sabes, pues tararearlas es algo inevitable.

Moviéndome de un lado por otro del escenario al ritmo de los bombos, la trompeta, los ritmillos de la guitarra de  ‘’chiki’’  y a ese torbellino  de Anita expresando toda la fuerza de las canciones de la banda. Sin parar de mover brazos, piernas, comunicándose en todo momento con público y colegas de escenario nos dedica una canción, ‘’Bellas’’, aludiendo a ese día especial que es el día de la mujer.  Un verdadero placer para los oídos y para el alma, ea.

Y es que me quedo corta con la descripción de sentimientos que se aúnan en un concierto de Canteca de Macao.  Tocan temas como la rumba de  ’’No llores’’ o ‘’Contigo’’ con un toque de arte flamenco,  o ‘’la rubia perfecta’’, con la que es imposible no acabar cantando el eres tú, eres tú, la chica con la que soñé… que no puede tener un aire más buenrollero.

Se deja distinguir en ‘’Sin solución’’ una guitarra eléctrica que pone ese vínculo entre rock y rumba que sienta tan bien.  Me encanta, he de reconocerlo. Dejando a un lado lo subjetivo, decir que esta banda, sin duda, tiene la frescura de saber innovar y de no tener un estilo claro, hablando en el mejor sentido.  Flamenco, rumba, reggae, ska, rock, jazz. Son capaces de mezclarlos todos y que suene tan bien como para olvidarse de que la música es música y cuando te apasiona, cuando realmente la entiendes como algo en continuo cambio  no hace falta separarla por estilos y el resultado es algo tan bonito como Canteca de Macao. Podéis juzgar por vosotros mismos.

Volviendo al concierto, dos horas dieron para mucho y un repertorio con temas de sus cuatro trabajos hicieron una actuación más que especial.  El concierto acaba con mucho movimiento y letras más de protesta con ‘’Que es lo que pasa’’, y el ska del tema ‘’Alternativa Libertaria’’.   Despedida después de la banda madrileña al completo que culmina con una inclinación al público madrileño, expresándole así su respeto,  y el cual responde  con una común cara de plena satisfacción, yo entre ellos.

Gracias Canteca.