Último día en Viveiro, el sol volvía a radiar de lo lindo pero nosotros aguantamos durmiendo hasta las doce de la mañana, y ya sabéis, esto en un festival es una utopía, pero claro, vaya sitio tan guapo es el camping del Resurrection Fest, no nos cansamos de decirlo, a pie de playa, sombras...
Tras una ducha y un buen desayuno, nos poníamos nuevamente en marcha, cogíamos el autobús por tan sólo 1 € que nos dejaba en la misma puerta del festival, por delante teníamos una jornada encabezada por los californianos Bad Religion, los míticos Black Flag, el metal core americano de Killswitch Engage y los clásicos hardcore de Brooklyn a cargo de Biohazard, muestra heterogénea de estilos enmarcados en unas cuantas horas.
Ambiente
Como todos los días, arrancamos en la carpa Arnette para ver la savia nueva de las bandas que vienen, algunas fueron gratas sorpresas.
Black Off abrían fuego desde Pontevedra con sonidos trash metal, una buena forma de empezar el festival, moviendo las cabezas. Joven formación con una única referencia hasta la fecha llamada "Devious Insane", un Ep conceptual de sólo tres temas con una clara declaración de intenciones y contundente denuncia social, trash metal de la vieja guardia que mira encarecidamente a los años 80.
Wolves are Coming, banda de A Coruña, encaminaron su propuesta hacia el hardcore metal de forma melódica, pero las bandas padre a la que forman parte alguno de sus componentes, Mary Read y Twenty Figters, son más aplastantes. Trashnos, también formación veterana gallega, siguen al pie del cañón con su cóctel explosivo de buena música, ya les hemos visto unas cuantas veces y se les nota que tienen tablas sobre un escenario.
We Ride fue una de las pocas formaciones con voz femenina al frente, y tan sólo por eso, por mostrar algo distinto, llamaron nuestra atención, a parte está su potente hardcore metal. Un concierto que poco a poco fue encendiéndose, con una Mimi (cantante), impresionante, bajándose del escenario para cantar con su fiel y nutrido público. Su último disco "On the Edge" ha conseguido con lucha hacerse un hueco en la escena.
Thirteen Bleed Promises desde Madrid y Mostomalta desde Mendoza, Argentina, no pasaron desapercibidas en las últimas horas de la tarde, los primeros con su aplastante brutal death core y los segundos con ese hardcore old school. Consiguieron abarrotar la carpa.
Evergreen Terrace despedían la programación de este pequeño y acogedor escenario, machacando con registros de voz melódicos y agresivos del otro lado del charco. Si duda eclipsaron al resto y nos dejaron con el gusanillo de conocerles aún más, a ver que nos cuenta nuestro amigo google. Hay bandas que dejan huella y sin duda esta fue una de ellas, habrá que seguirles de cerca la pista.
Abandonamos este escenario que bien recordaremos, descubrimos nuevas bandas, estuvimos recogidos del sol y lo mejor, fue el que mejor sonó de todos.
We Ride
Ahora nos metemos con el siguiente escenario, allí veríamos a Toundra, a los míticos Black Flag o Street Dogs, que días atrás fueron confirmados tras caerse del cartel Strung Out.
El trash metal valenciano acechaba nuestros oídos, llegaba el turno de Exodia, formación que días atrás vimos en el Luarca Metal Fest y que ponían nuevamente toda la carne en el asador con su salvaje propuesta. Entraron en el cartel gracias a quedar segundos en el concurso de bandas del festival (Band Contest). Su último trabajo "Slow Death" consigue facturar buenas canciones con matices que tiran hacia el heavy metal e incluso al groove, bien influenciados por unos a los que se atrevieron a versionar, Pantera, con un temazo, "Fuckin Hostile".
Horn of the Rhino, nuestros buenos amigos de Bilbao, aparecían con sus sonidos groove con ciertas reminiscencias hacia el clásico stoner y doom metal, consiguiendo que la carpa estuviera fantásticamente nutrida de público. Desde el underground y gracias a discos como "Grengus", su obra más reciente y su dilatada carrera han generado este tipo de historias, muchos seguidores que no se quisieron perder la cita. El trío se comió el escenario, resaltando el entusiasmo de su bajista que aterrizó encima de los amplis que estaban en el foso, aporreando con furia su Rickenbacker. Esta actuación seguro que les ha ayudado a darse a conocer mucho más!!
Horn of the Rhino
Día de los Muertos, de México, les podemos otorgar el honor de ser una de las bandas revelación del festival, otra de las pocas formaciones con chica al frente que abogaron y sorprendieron por su metal enraizado en corridos y mariachis. Un lujo verles en directo, grata sorpresa venida desde el otro lado del charco, quizás por su hermandad, nos recordaron a Brujería. El carisma y la simpatía de su cantante ayudó a que su concierto no decayera en absoluto. Si esto es lo que se hace hoy en día en México, me voy allí de cabeza. Recomendables conocerles!!
Toundra nos ofrecieron una soberbia y frenética actuación, que les llevo a acabar antes de tiempo recibiendo una épica ovación, lástima que no pudieran incluir un bis porque los minutos que les sobraron no eran suficientes para meter uno de sus temazos. Su personalidad forjada a ritmo de post rock con amplios desarrollos ambientales encajó a la perfección a esas horas de la tarde, no todo iban a ser gritos emocionales cargados de potentes voces.
Y de nuevo regresamos al sonido que más representación tuvo en el Resurrection Fest, el hardcore, ahora le tocaba el turno a Your Demise, formación inglesa que vino a Viveiro para despedirse del público estatal tras anunciar una separación amistosa meses atrás. Concierto emotivo, donde todos los componentes se dejaron la piel a sabiendas de que se les acaba el tiempo y pronto llegará su extinción. Voz embrutecida con ritmos acelerados e incesantes, cambios de registros capaces de aplastar tímpanos, así se las gastan esta gente.
Black Flag, una de las bandas pioneras del punk californiano, volvían a juntarse el año pasado para sumergirse en una extensa gira por todo el mundo. Con una hora de actuación, nos recordaron los años donde el punk con el hardcore explosionó, pero estos, los llevaron a territorios jazz y ritmos progresivos, vamos, una mezcla en toda regla. Greg Grinn y Ron Reyes siguen siendo los baluartes de la formación y supervivientes de la década de los 70, que junto con Gregory Moore y Dave Klein, capitanean un renovado e ilusionante proyecto. Vimos a unos dinosaurios vivos repasando una trayectoria repleta de clásicos "Six Pack", "Black Coffee", "Gimmie Gimmie Gimmie", "Police Story", "Rise Above", o "Jealous Again" con un correoso sonido, fueron selectivos y efectivos al mismo tiempo. Una de las citas que muchos esperaban y que otros criticaban viéndoles en declive y oportunistas, pero dejaron claro que algunas bandas míticas funcionan en estos tiempos.
Street Dogs con el cantante original de Dropkick Murphys, Mike McColgan, nos dejó sonidos más festivos repletos de folk incrustados perfectamente con el stree punk, allí vimos muchos bailes y jolgorio en las primeras filas. Cinco discos a sus espaldas les avalan y en Viveiro presentaron el último como se merece con título homónimo. “Punk Rock & Roll” uno de sus himnos que merecen un monumento.
Y terminamos con la programación de este escenario y del festival con el concierto de Rancis, banda tributo de los americanos Rancid, y ya sabéis, nosotros para casa.
Y de principio a fin vimos todas las actuaciones del Resurrection Fest!!!
Día de los Muertos
Terminamos con la crónica del festival principal en su último día de ejecución, Monster Energy, empezando con Blowfuse, joven formación procedente de Barcelona que la liaron parda con un divertido hardcore melódico repleto de ritmos rápidos, melodía a raudales y gran carisma, esas fueron las claves de su actuación. Las nuevas generaciones vienen pisando fuerte y esta es una de ellas. Si siguen en ese ritmo pronto les tendremos presentando un cuarto disco por toda la península en una extensa gira. Despuntaron, sobre todo su cantante que voló por encima de las cabezas de los primeros presentes.
Rise to Fall siguen entrando en los festivales importantes y afianzan sus tablas aún más. Nada nuevo vamos a encontrar en su sonido pero si muchas ganas de hacer algo dentro de la escena del death melódico con un toque de personalidad propia. Sus reminiscencias a In Flames se van alejando al igual que hacen con la música comercial del género, se inclinan por el metal más pesado y melódico. Presentaron su último disco hasta la fecha "Defying The Gods", un trabajo abierto con estribillos pegadizos y buena armonía en las voces con registros limpios, con gran presencia de guitarras, y todo ello, con sonidos sintetizados. En estos momentos están despuntando y recogiendo los frutos que sembraron hace muchos meses, por ahora ya han girado por Japón y Bélgica.
Crisix, que siempre que pueden y les llaman, se apuntan a un bombardeo y más cuando están de estreno con "Rise... the Rest". Ratificaron su buen estado de forma y son un ejemplo de cómo hacer las cosas bien, eso se llama allanar el camino y no otra cosa. A pesar del mal sonido que fue más bajo de lo normal, lograron sincronizar sus instrumentos consiguiendo una nitidez absoluta, además contaron con invitados de lujo como Guillermo de Angelus Apatrida o Pla de Mutant Squad en "Ultra Trash". No todos los días se puede juntar la parroquia amigos del metal sobre un escenario, fue un encuentro explosivo y divertido a la vez, donde también recordaron a S.A con las estrofas irónicas de "Nos Vimos en Berlín".
Demoledores!!
Rise to Fall
I Killed the Prom Queen los más alejados de nuestro país, nada más ni nada menos venían desde Australia con una buena ración de deathcore - metalcore. Show equilibrado y sólido con un carismático guitarrista y miembro fundador Jona Weinhofen (ex Bring me the Horizon), que ha vuelto a renovar la banda y fichar a buenos músicos que a ratos nos dejaron boquiabiertos. Saltos y movilidad no les faltaron y es que iban a montar un espectáculo en mayúsculas, quizás por eso grabaron imágenes con una cámara voladora dirigida a radio control. Recordar, en el 2.014 sacarán nuevo disco "memento Vivire", estar atentos porque seguro volverán a visitarnos.
A Killswitch Engage teníamos muchas ganas de ver y a Dios gracias su directo no falló en absoluto, que pasada de actuación se metieron entre pecho y espalda. Solo por ver en acción a su guitarrista Adam Dutkiewicz, merece la pena verles, lo da todos sobre el escenario, recorriéndose continuamente a carreras los contados metros de tablada.
La banda llega con un disco nuevo "Disarm The Descent" y con el regreso de su primer cantante Jesse Leach, que le vimos en un buen estado de forma conservando esos matices de registros que recordábamos. Respecto a las canciones que interpretaron, eligieron un set list centrado en el nuevo trabajo, tal como "New Awakening", "A Bid Farewell" o "In Due Time" iban dejando paso a los temas mas carismáticos de sus anteriores discos, "Life to Lifeless", "My Last Serenade", "Alive or Just Breathing" o "My Curse" que explotaron en jubilo. Show divertido que nuevamente la única pega fue el horrible sonido.
Y tras ellos y a modo sorpresa, anunciaron la primera banda confirmada para el año que viene, NOFX, otros clásicos del hardcore melódico que si podemos, no nos perderemos.
Killswitch Engage
Bad Religion, iconos del hardcore melódico californiano fueron los grandes cabezas del cartel en esta jornada. Si bien cuando tiran de clásicos son capaces de revolucionar el gallinero, pero por el contrario, mejor no decir nada. Parece ser que su hora de dejar los escenarios ha sido anunciada pero curiosamente sobre los escenarios no dicen nada más.
Una puesta en escena sosa y sosegada, de esas que no ayudan nada al show, pero sus temas míticos les llevaron en volandas de popularidad, gracias a “No Direction”, "No Control", "Punk Rock Song", "Sorrow", "Fuck Armaggeddon" o “Infescted”, en cambio las más nuevas del disco "True North" mermaron a la gente, ya sea “Past Is Dead” o “Fuck You” por mencionar alguna.
A pesar de la falta de entrega, su larga trayectoria de más de 30 años hace que les perdonemos, sus canciones siguen rodando en nuestras cabezas desde la pubertad y eso pocas bandas lo consiguen, nos hicieron rejuvenecer y recordar bonitas historias.
Os echaremos en falta...
Biohazard, los grandes de la escena del harcore neoyorquino, más exactamente de Brooklyn, supieron cerrar como se merece el festival, a pesar de no contar en sus filas con su vocalista y bajista Evan Seinflied, pero supieron conectar con el público con la entrada a la voz de su guitarrista de toda la vida, Billy Graziadei.
Recordamos con ellos tres de sus grandes discos, “Urban Discipline”, “State Of The Word Adress” o “Mata Leao” como piezas fundamentales de su set list. Sonaron con fuerza gracias a los temas fundamentales de la talla de “Shades Of Grey” de comienzo, “Urban Discipline”, “Down For Life” o “Vengeance Is Mine”. Dejando a cuentagotas canciones de su ultimo disco, ”Reborn in Defiance”, como “Reborn”, llegando después a sorprender, con la cover de sus compañeros de escenario, Bad Religion, “We're Only Gonna Die”, un tema que hicieron suyo con su tono personal. Fantástica!!!.
Con un cierre de concierto con, “Punishment” o “Hold My Own” por todo lo grande, consiguiendo, los últimos pogos del respetable. Auténticos!!!.
Así dimos por concluido nuestro paso por Viveiro, del que esperamos repetir el año que viene si nos cuadra dentro de nuestro calendario. Si es así, no fallaremos!!!!.