A pesar de que era un día lluvioso en la capital, el pasado sábado 2 de junio el concierto de Doctor Deseo iba a caldear el ambiente. El grupo bilbaíno llegaba a Madrid para presentar su nuevo trabajo en la Sala Copérnico, compuesto por un libro, CD y DVD y titulado "La fuerza la fragilidad. Palabras ante el espejo" (Baga-Biga, 2018).

La cantautora navarra afincada en Madrid, Montxika Baut, fue la artista invitada y que tuvo el honor de abrir el concierto presentando su disco "Trayectos". Sin duda el ambiente ya comenzaba a prepararse para lo que estaba por llegar. Tras ella, y muy puntual, Doctor Deseo hizo acto de presencia en el escenario. La boa colocada en el micro y Francis con sus guantes de rejilla y la liga roja, empezaba un viaje de pasión, lujuría y mucho deseo.

La canción "Alfarera de sueños" de su último disco fue la que abrió el concierto, que fue de menos a más durante las casi dos horas que duró. El grupo hizo un repaso a gran parte de su discografía interpretando temas como "De chocolate y vainilla", "Olas y naufragios" o "¡Cuánto frío hace en Saturno!".

A pesar del paso de los años, Doctor Deseo nunca ha defraudado en un directo, hacen que el público participe con ellos y lo vivan de la misma manera. Sus canciones transportan a un mundo de sueños, pero también de cruda realidad, de situaciones en las que, en mayor o menor medida, todos nos hemos podido ver en algún momento. Su música y sus letras, son las que han hecho de este grupo de rock un referente en el panorama musical español, convirtiéndose en uno de los grupos vascos más consolidados desde que surgiera en los años 80.

Con Francis desplazándose por la sala, mezclándose entre el público, cantando y sintiendo con ellos, llegó el momento de una de las canciones más conocidas del grupo, "Corazón de tango", que el públicó coreó con el cantante y también del tema "Abrázame", que el bilbáino cantó acompañado de Montxika Baut. Pero esto no consiguió que el público se viniese abajo, el grupo continuó con temas más movidos como "Por la madriguera del conejo blanco" de su último disco y la mítica "La chica del Batzoki" para finalizar el concierto en lo más alto.

Los conciertos de Doctor Deseo siempre consiguen que el público termine con ganas de más, de seguir disfrutando, bailando, sintiendo y sudando, porque, otra cosa no, pero este grupo siempre consigue que el ambiente termine caldeado en cada uno de sus directos. Les espera una gira intensa durante este verano y allá donde vayan no decepcionarán en ninguno de sus directos.