Viernes 29 de mayo de 2009. 32ºC a la sombra y nos dirigimos al Palacio de los Deportes de Madrid, buscando un poco de fresco y un mucho de buena música en directo.

Después de varias vueltas por los aledaños y por dentro del recinto descubrimos sobre el escenario a los maños El Muro de Berlín; con una estética un tanto peculiar, la verdad es que no sonaban nada mal, pero nada nuevo que no se haya oído anteriormente, quizás una mezcla entre Pereza y Despistaos que posiblemente les haga sonar en algún que otro medio de comunicación.

Cabe destacar el carisma del cantante sobre el escenario, muy gestual y con unos contoneos bastante insinuantes que hacían ahogarse en gritos de histeria a las ocupantes de las primeras filas… menos mal que había vayas de seguridad.

 Antes que los de Zaragoza estuvieron tocando The Noises, y es que La Fuga era el plato fuerte de los finalistas del concurso de maquetas que organiza todos los años Jack Daniels y que por cierto ganó el último grupo mencionado.

Con el grito de “Desde Reinosa, Cantabria, La Fuga” dio comienzo el espectáculo en un Palacio de los Deportes de la Comunidad de Madrid lleno hasta la bandera. Una se sentía bastante insignificante en el foso viendo a estos monstruos de la música sobre un escenario que ya lo quisieran para sí muchos de los que se consideran “grandes” en este país.

Los campurrianos estuvieron en su salsa desde el primero momento, comenzando con el tema “Los Molinos”, incluído en su último disco Asuntos Pendientes que les ha llevado de gira durante el último año por todo el país y parte de Latinoamérica y que da ya sus últimas bocanadas, y terminando con el ya mítico “P’ aquí, P’ allá” coreado al unísono por todos los asistentes, mientras Nando tocaba los acordes y Rulo sacaba la bufanda de La Fuga.

Las cerca de dos horas y media de concierto dieron para mucho, para gritar y cantar en todo momento, para saltar y hacer pogos en canciones como “Los de Siempre” ó “Pedazo de Morón” y también para la tranquilidad ó momento mechero, cuando Rulo se sentó al piano para hacernos una versión de la más que conocida “Luna de Miel” que no falta en cada concierto.

Repasaron gran parte de los temas de su último disco, aunque personalmente eché el falta la canción “Vengo” que tiene un nosequé que la hace especial, y tocaron las canciones de siempre, “Buscando en la basura”, “Por verte sonreír”, “Baja por diversión”, con dos bises incluídos y un público ferviente pidiendo más y más incluso cuando acabaron de caer las serpentinas y el confeti (como en los conciertos de Los Suaves), las luces del pabellón ya se había encendido y todo presagiaba que se acabó lo que se daba.

Después fiesta sobre el escenario, reparto de baquetas, púas y demás enseres, subidas a hombros de los miembros de la banda,  saltos y sonrisas de oreja a oreja, muy buen rollo al fin y al cabo, se nota que estos chavales disfrutan de la música y en resúmen, hoy se puede decir con voz bien clara (aunque ya hace tiempo que se puede decir) que La Fuga es un referente en la música nacional haciendo lo que mejor saben hacer, subir la palabra Rock a lo más alto del podio.