Se nos presentaba una agradable noche de verano tardÃo, la noche nos dio un respiro en cuanto a la temperatura acontecida durante la tarde. Úbeda nos recibió majestuosa, como solo ella sabe que lo es, como un hervidero de bombines que colapsaban las calles aledañas al concierto. Todas las localidades vendidas, un aforo de 10.000 personas preconizaban una gran noche. [ crónica ]