Tenía varias dudas ese día sobre a cuál de los muchos eventos acudir, dudas que se disiparon al tener a unos pocos metros un concierto de dos bandas a los que no había visto nunca, lo que me provocaba cierta curiosidad. Todo ello acompañado por una barbacoa previa con la que nos deleitó la gente del Varuko. Al llegar al local, vi que aquello iba para largo y que, aunque la barbacoa estaba anunciada para las 20.00, los conciertos no empezarían antes de las 22.30. Con la duda de si quedarme allí o dar una vuelta para luego volver, decidí quedarme para poder charlas con parte de los presentes. [ crónica ]