Parece que el Saharatxorock no tienen límites, cada año su cartel supera al anterior y lo mejor de todos, que es un evento gratuito y para toda la familia. Festival que se celebra anualmente en la localidad bizkaina de Zaramillo, con una ubicación fija en el frontón de la localidad pero con una fecha variable, unos años se ha celebrado en febrero, el año pasado en abril y este en mayo, me imagino que la organización lo haga en vistas al buen tiempo ya que los conciertos son al aire libre, pero ni con esas, porque este año siendo mayo, ha hecho un frío de tres pares de narices, menos mal que no llovió.

Teníamos por delante siente actuaciones con música de todo tipo, rock, metal y punk rock, desde bandas pequeñas y que están empezando a formaciones consagradas que llevan en esto desde que uno tiene uso de razón.

Nos acercamos a Zaramillo a media tarde, aún quedaban dos horas para los inicios de los conciertos, pero como no teníamos otro pito que rascar, carretera y manta, allí nos encontramos a varios amigos con los que compartimos gratas conversaciones, sobre todo con la gente de Venta de Baños, donde los pingüinos y guardia civil se mueven a sus anchas, y no lo digo yo...

A las ocho de la tarde empezaron las actuaciones en directo de la mano de Spain Tortures, formación desconocida para nosotros e internet en general porque encontrar algo de esta gente en la red de redes es como buscar una aguja en un pajar, a lo mejor es que están censurados porque vaya nombre se gastan.

Intercalaron canciones en euskera con el castellano, como una que hablaba de la crisis, tema muy de moda, y alguna que otra versión que reconocimos a la primera, un "Pauso Bat" de Soziedad Alkohólika. Muchas y largas pausas entre canción y canción, eso nos dice que la banda está empezando.

Un concierto sin más que añadir.

Los siguientes La Tronera, otra formación que no habíamos oído nada de ella, pero esta vez el resultado fue totalmente al contrario que lo que escuchamos hace unos minutos, nos sorprendieron gratamente con sus sonidos urbanos donde el rock y el punk rock se mezclaban por momentos, recodándonos muchísimo a Silencio Absoluto.

Formación clásica de dos guitarras, bajo, batería y voz, este último versito completamente de blanco, es un dato que no aporta peso pero que nos llamó la atención porque lo normal en el rock es vestir con colores oscuros, un dato de mierda, sin más. :)

Empezó a sonar una intro que nos recordaba a nuestra infancia, un "Manamaná" que se hizo popular gracias al programa infantil Barrio Sésamo, os dejamos en enlace del video. Luego se presentaron en forma de canción, menos mal que lo hicieron así porque durante su concierto no hicieron pausas ni para decir quiénes eran y que temas iban a tocar a modo de introducción, fuero a piñón fijo, el tiempo a previa.

No tienen nada grabado, apenas una maqueta casera con cinco temas que regalaron a final de la actuación, muchos acudimos a por ella porque realmente esta gente nos alegró la tarde.

Les seguiremos la pista.

Creo que no somos conscientes de lo que vemos cuando aparece Desakato sobre un escenario, sabemos a ciencia cierta que son una de las bandas más en forma de nuestro país, pero estoy seguro que si tuvieran un enfoque internacional, estaríamos ante una banda conocida por toda Europa, no sé si les falta llegar a acuerdos para editar sus trabajos fuera de la península, o cantar algo en inglés como hacen otros grupos, no lo sé, pero talla musical y calidad sonora tienen para dar y tomar.

La gente empezó a llenar el frontón, madre mía, ¿donde estaban antes?, ¿debajo de las piedras?, por delante tendríamos más de una hora de pura adrenalina asturiana. Un set list familiar para nuestros oídos, son tantas las veces que les escuchamos que nos conocemos sus conciertos al dedillo, así que tampoco vamos a rizar el rizo, mejor leer nuestras propias palabras escritas en dos de sus actuaciones pasadas, cuando participaron en la novena edición del festival cántabro Azeros Rock Festival, y otra de uno de sus conciertos compartidos con Mala Reputación, concretamente el de Comillas.

Supieron mover bien a la peña desde principio a fin, con un gran Pepo más activo de lo normal que ya es decir, dándolo todo con codazos al aire y constantes saltos. El resto no se quedó a tras, les vimos entregados y su fuerza se traslado a los cientos de personas que se trasladaron a verlos.

Son grandes, lo saben y lo sabemos.

Llegó uno de los momentos más esperados, para mi, de la noche, de nuevo volvería a ver sobre un escenario a los riojanos Silencio Absoluto, ya han pasado muchos años desde la última vez, sin exagerar 8 ó 9 años (como Trece Forajidos no ha pasado tanto tiempo). Desde que anunciaron su regreso, estábamos esperando con ganas el reencuentro y viendo que en Santander no cuajaba una actuación suya ni queriendo, pues fue uno de los empujones que nos llevó a asistir al Saharatxorock.

Allí estaban ellos, Jabato con su buen hacer a las seis cuerdas, Joselito Apaleao, el disfrute al máximo dando presencia al bajo, muchas veces menospreciado en el rock, los "nuevos", Samuel a la guitarra y Jorge a la batería, y el pequeño pero gran Txinín, que nos dio un susto al no verle probar sobre el escenario e interpretar los primeros minutos "escondido", pero apareció y lo hizo como bien sabe hacerlo, saltando y lanzando pequeños guiños al público.

Y a partir de de este momento, a disfrutar, un "Camisa de once varas" por aquí, un "A las noches le sobra los días" por allá, "Esta mi historia", "Oigo Campanas", sin dejar atrás las nuevas composiciones que están a la altura de las de siempre, "A lomos de un rokanrol" con el que empezaron y se presentaron a modo sintonía, pero luego vino la presentación oficial, esa que siempre les caracterizó, con una breve descripción de cada componente (incluido Aaron - road manager - y Kami - backliner) con un par de minutos de gloria individual, como lo echábamos de menos!!!.

Siguieron con el recuerdo de una banda que significó mucho para nosotros y para los inicios de Insonoro.com (la primera crónica catalogada en esta web es de un concierto suyo con Boikot en Bilbao en el 2.002), se despidieron de todos nosotros como siempre hacen y hacían, "Marihuana", esta vez sin peluche en forma de porro.

Si antes con Desakato aparecieron gente de debajo de las piedras, con Gatillazo se sumaron los que viven en el subsuelo y los extras de El Señor de los Anillos, mirabas hacia atrás y veías gente y más gente, y es que Gatillazo con un Evaristo al frente tiene tirón, sin olvidarse de que era un festival  gratis, ya sabéis como el mundo quiere a gratis, que señor más majo.

Íbamos de nuevas, sin escuchar el disco nuevo de Gatillazo "Siglo XXI" que tanta gente nos ha dicho que es una pasada, y la verdad que sí, los temas que tocaron que creo que fueron todos, sonaron a cañón y una vez más comprobamos que Evaristo como frontman y letrista no tiene precio.

Dos horas seguidas de punk rock marca de la casa, un grupo conjuntado y confidente que seguramente se pase horas y horas en el local de ensayo, sino, no tiene explicación tocar tantas canciones en tan poco tiempo y una tras otra, mezcladas como si fueran una misma, sin tregua ni parones. Ayuda mucho que las interpretaciones de Gatillazo apenas lleguen a los tres minutos.

 Parece que los años no pasan para Evaristo, nunca le hemos visto un concierto flojo, parece todo lo contrario, tiempo que pasa, tiempo que rejuvenece, sigue con sus mil y un gestos que hacen que las canciones nos lleguen más adentro, sus movimientos y acercamiento a sus compañeros fueron constantes, porque vaya músicos que hay en Gatillazo, son grandes, empezando por un ex Disturbio como es Txiki que desarrolla una gran personalidad a la guitarra, Angelillo a la otra guitarra compartiendo afición con su otra formación Rockaina, Butonbiko al bajo y Tripi marcando el ritmo a las baquetas.

Catalogar a un grupo como el mejor en su género es un insulto al resto de formaciones, pero es que Gatillazo se lo merecen, que no??

Y para terminar, una de cal y una de arena para la organización, de primeras nuestras más sinceras felicitaciones por realizar otro año más un festival de estas características, nos da igual que sea en enero, abril, mayo, lo importante es que haya gente capaz de tirar para adelante y llevar a buen puerto un festival en mayúsculas. La nota negativa, a sabiendas que con Gatillazo y demás bandas se iba a llenar el recinto, ¿cómo no pusieron seguridad en la zona que separa escenario y público?, vimos gente invadiendo el escenario constantemente, zombis que se quedaban trabados en las vallas que además de hacer el ridículo, no dejaban ver al resto, y lo peor de todo, había peña que en determinados momentos se dejaba llevar por la euforia y movían la torre donde colgaban los altavoces laterales, luego pasan cosas terribles y llega el momento de lamentarse, un poquito de por favor!!

Aun quedaban un par de grupos por tocar, pero entre el frío y el cansancio decidimos dar por finalizada nuestra aventura por Zaramillo.